Reconocen Padres de Familia que no Será Fácil Imponer Nuevos Hábitos Alimenticios en las Escuelas

• Prevén rechazo a la nueva medida especialmente entre los menores de edad

• Consideran que las tienditas podrían enfrentar pérdidas y falta ver que se hará con los vendedores ambulantes que están a las afueras de los planteles

Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 23 de enero.- A pesar de que la Asociación Nacional de Padres de Familia sí avala el retiro de la comida chatarra en las escuelas públicas y confía en que los estudiantes se acoplarán a un régimen más sano, existen agrupaciones locales que tienen una visión diferente de la nueva normatividad que comenzará a aplicarse en marzo próximo en todo el país, ya que aseguran, no será nada fácil hacerlo.

En el caso de Padres Aliados por la Educación, el presidente Héctor Santín Gómez, indicó que el eliminar de golpe ciertos alimentos a los que están acostumbrados los menores y obligarlos a sustituirlos por otros productos considerados más sanos y que son bajos en grasa, sodio y azúcar, será todo un reto, debido a que muchos tienen hábitos alimenticios ya arraigados y no querrán modificarlos, por lo que anticipan habrá un rechazo a la medida.

“Si vemos muy difícil que se retire la comida chatarra de las escuelas, los menores no están acostumbrados a comer sano y esto podría durar solo unos días y luego los estudiantes comprar por fuera los productos que se les prohíbe ingerir en el interior del plantel, entonces pues no se haría mucho, sin embargo la medida que pretende aplicar tanto la SEP como la Secretaría de Educación en Quintana Roo es buena, porque lo que se busca es prevenir que haya más niños con sobrepeso u obesidad, pero habría que ver que tanto se podría avanzar con esto y si los niños lo aceptarán.”

Mencionó que la comida chatarra se ha vendido por muchos años en todas las escuelas sin excepción, por lo que modificar ahora pudiera derivar en que no existan ni siquiera las tienditas escolares, ante las pérdidas que pudieran enfrentar por la cantidad de comida saludable que tendrían que adquirir, considerando que los precios de la fruta y la verdura no son tan accesibles y a diferencia de otros artículos comestibles, no pueden almacenarse por mucho tiempo.

Además, refirió que también está el hecho de que a las afueras de los espacios educativos existen los vendedores ambulantes, por lo que habría que ver la postura que tomará la Secretaría de Educación en torno a esto, porque también restringirles que se acerquen, derivará en una afectación económica para las familias que dependen de esta actividad.

“No podría ser siempre que las tienditas ofrecieran solo comida sana, perderían y por ende las escuelas, no estamos acostumbrados a comer solo vegetales o frutas y también está el tema de los que venden afuera, tendrían que establecerles que se alejen para que los niños no tengan tentación y esto afectaría también a los que viven de esta actividad.”

Precisó que ante la propuesta, primero se debe hacer una prueba con los menores y en caso de que se acepte, tener un menú elaborado por especialistas en nutrición para obtener los resultados que se esperan.

lau.beytia@diariocambio22.mx 

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