La Ocupación Hotelera se Mantuvo Baja en Valladolid, Hasta el Final de la Temporada Vacacional.

• La caída del turismo, atribuida a la inflación y eventos internacionales, preocupa a hoteleros que buscan estrategias para revertir la situación en los próximos meses.

ERICK MARTIN HUH / CAMBIO 22

VALLADOLID, YUCATÁN, 18 DE AGOSTO.-La temporada vacacional de verano ha presentado cifras poco alentadoras para la industria hotelera en Valladolid, con una ocupación promedio de apenas 45%, lo que representa una caída del 15% en comparación con el mismo periodo de 2023.

Este descenso ha preocupado a los empresarios del sector, quienes atribuyen la disminución en gran parte a la inflación y al encarecimiento de los productos y servicios, factores que han limitado la llegada de turistas nacionales y extranjeros.

Héctor Bustos Sosa, presidente de la Asociación de Hoteles y Hostales de Valladolid, señaló que el flujo de turistas este año ha sido notablemente inferior, en particular en lo que respecta a visitantes europeos. “Eventos internacionales como las Olimpiadas y la Eurocopa han desviado la atención de los turistas hacia otros destinos, lo que ha afectado directamente nuestra ocupación”, explicó Bustos Sosa.

A medida que se aproxima el fin de la temporada vacacional, se espera que la ocupación continúe en declive, con un pronóstico aún más preocupante para los meses de septiembre y octubre.

Ante esta situación, los hoteleros están considerando estrategias para enfrentar la crisis; Entre las propuestas se encuentran la organización de eventos que coincidan con fechas clave, como las celebraciones patrias en septiembre y el equinoccio de otoño en Chichén Itzá. Además, se están planificando actividades adicionales, como una carrera ciclística de alcance nacional, con la intención de atraer más visitantes durante los meses de menor afluencia.

Por otro lado, la sobreoferta de hospedaje en la ciudad ha agravado la situación; En los últimos cuatro años, el número de habitaciones disponibles se ha incrementado significativamente, pasando de 900 a 1,600, y los alojamientos tipo Airbnb han crecido de 100 a 400 en el mismo periodo.

Noé Rodríguez Cervera, otro representante del sector hotelero, advirtió sobre los riesgos de seguir invirtiendo en nuevas construcciones de hospedaje ante la falta de un crecimiento proporcional en la demanda turística.

A pesar de las advertencias, en pleno centro de la ciudad se siguen construyendo nuevos hoteles, lo que según los empresarios podría saturar aún más el mercado y empeorar la situación económica del sector en Valladolid.

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LRE