Cae la Justicia 12 Años Después: Condenan a Dos Asesinos por Brutales Homicidios en Othón P. Blanco

Redacción / CAMBIO 22

OTHÓN P. BLANCO, QRoo, 20 de agosto de 2025.- La muerte no olvida. Dos hombres que creyeron haber escapado de la justicia, finalmente pagarán con 25 años tras las rejas por asesinatos sangrientos cometidos hace más de una década.

Después de años de investigaciones bajo el sistema penal tradicional, la Fiscalía General del Estado logró obtener dos sentencias condenatorias por homicidio calificado: una por un asesinato con una piedra en la cara, y otra por una ejecución a quemarropa en un trapiche del sur del estado.

Caso 1: Pelea por deudas termina en brutal asesinato con una piedra

Luis Eduardo Aban Ac fue condenado por el crimen ocurrido el 27 de octubre de 2012, cuando junto a otro sujeto acudió a una herrería en la avenida José María Morelos a cobrar una deuda.

Tras consumir cervezas, se desató una discusión con la víctima que terminó en una pelea. La víctima intentó defenderse, pero fue derribada con una piedra lanzada directamente al rostro, causándole lesiones mortales.

Por este crimen, Aban Ac recibió 25 años de prisión, una multa de más de 80 mil pesos, y el pago por daños morales y materiales que supera los 96 mil pesos.

Caso 2: Le disparó cinco veces y lo dejó tirado en el monte

En un segundo expediente, Pablo Cruz de la Rosa fue declarado culpable del asesinato cometido el 14 de abril de 2013. Conducía una motocicleta y recogió a la víctima para llevarla a un trapiche entre las comunidades de Ucum y Sac-Xan.

Tras conversar unos minutos, sacó un revólver de su pantalón y le disparó cinco veces a quemarropa, dejándolo sin vida en el lugar.

El juez lo sentenció a 25 años de prisión, una multa de más de 61 mil pesos, y el pago por daños materiales y morales que superan los 360 mil pesos.

La justicia tardó… pero llegó

Ambos casos ocurrieron hace más de una década, en un tiempo donde muchos crímenes quedaban impunes en las sombras del viejo sistema. Hoy, los homicidas finalmente enfrentan el encierro que el tiempo intentó borrar.

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