Redacción/CAMBIO 22

CHETUMAL, 9 de mayo.- Deliberadamente policías estatales que un llamado de emergencia, donde un presunto ladrón resultó lesionado al ingresar a un predio, trataron de protegerlo de la mirada de los vecinos, curiosos y la prensa, colocando una valla con sus cuerpos. Esto ocasionó que vecinos de la zona que presenciaban los hechos señalaran a los agentes de ser sus secuaces.

La tarde de hoy, un presunto ladrón resultó lesionado en la calzada Centenario con Francisco Zarco al saltar techos durante su intento de fuga. Pero, lo que llamó la atención no fue el acto delictivo en sí, sino la actitud de los policías estatales que llegaron al lugar para atender la emergencia.

A pesar de que los hechos ocurrieron en plena vía pública, los policías colocaron una valla humana para proteger al presunto delincuente de la vista de los curiosos y de los medios de comunicación que se encontraron en la zona. Esta acción destacó molestia y descontento entre los vecinos de la zona, quienes señalaron a los policías de estar encubriendo al delincuente.

La actitud de los policías fue criticada por muchos, quienes consideran que su deber es proteger a la ciudadanía y no a los delincuentes. Además, esto pone en duda la integridad de los agentes de seguridad y la transparencia en su actuar.

La colocación de la valla humana también fue cuestionada por la prensa local, quienes consideran que esta acción viola la libertad de prensa y el derecho de la ciudadanía a estar informada de lo que sucede en su comunidad. La prensa local exige una explicación clara y transparente de lo sucedido.

Por su parte, las autoridades competentes no han emitido ningún comunicado oficial sobre los hechos, lo que genera aún más sospecha y desconfianza por parte de la ciudadanía.

Es importante recordar que los policías tienen la obligación de proteger y servir a la ciudadanía, y no a los delincuentes. Este actuar de los policías solo genera más desconfianza y falta de credibilidad en las autoridades encargadas de proteger a la ciudadanía.

La actitud de los policías al proteger al presunto delincuente de la vista de la ciudadanía y de la prensa es preocupante y genera desconfianza en las autoridades encargadas de la seguridad pública. La ciudadanía exige transparencia y una explicación clara de lo sucedido, así como una garantía de que los policías están al servicio de la ciudadanía y no de los delincuentes.

redaccion@diariocambio22.mx

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