Una Semana con los Pasajeros del “Armonia “: Una Puerta Con Crucifijos

Se preveía que el turismo de cruceros se vería gravemente afectado por el naufragio del Costa Concordia , y posteriormente por la COVID-19. En realidad, el sector nunca ha estado mejor, con 34,6 millones de pasajeros en todo el mundo en 2024, un 9 % más que el año anterior y un 16 % más que en 2019. Al embarcar en un barco de MSC Kentre Venecia y Mykonos, podrá comprender mejor los factores que impulsan este éxito comercial

Redacción/CAMBIO 22  

El tiempo parece detenerse en un mar Adriático desierto. “Siente la magia en el aire. La música pop de la banda Magic System se mezcla con el ruido sordo de los motores. El Armonia tiene 2.620 asientos para pasajeros y una tripulación de 721. La estela de este edificio de 13 cubiertas y 274 metros de largo difumina el azul profundo de las aguas, mientras que el cielo azul está velado por el humo arrojado por la gran chimenea estampada con el logotipo de Mediterranean Shipping Company (MSC), la compañía naviera líder en el mundo y la cuarta más grande solo para cruceros.

En la cubierta superior n° 12, Zaffiro (“zafiro“), los cruceristas descansan en las tumbonas que son asaltadas, que dan la espalda a un mar aceitoso. Al amanecer, estas tumbonas se colocaron mirando hacia el interior del barco y no hacia el Mediterráneo. “Es el depósito, pero puedes devolverlo si quieres“, suspira Amman, un filipino cuyo nombre y nacionalidad están escritos en su placa, como todos los empleados. Los pasajeros tienen una vista panorámica de la cubierta 11, donde se llevan a cabo actividades organizadas. En esta tarde de junio, el “mega bingo” galvaniza a las multitudes, junto a las codiciadas piscinas de agua de mar y jacuzzis.

Los veraneantes en traje de baño centran su atención en las palabras del anfitrión brasileño: “¡25.000 euros, puedes ganar hasta 25.000 euros!”, grita Pedro en seis idiomas (inglés, francés, portugués, español, alemán e italiano). Un camarero indio cruza el denso campo de jugadores con su carrito. Multiplicando el ir y venir entre bares de cócteles y cocinas, el hombre de la camisa larga limpia incansablemente vasos de sangría o platos con el sello MSC, algunos de los cuales todavía están llenos de papas fritas o sándwiches abiertos. Bajo el sol abrasador, los buffets libres Il Girasole (“El girasol“), Hamburger Paradise o Pizza and Pasta ofrecen la posibilidad de comer casi a cualquier hora.

Este (…)

Fuente: Le Monde Diplomatique

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