Un Reencuentro Milagroso: Regreso a Casa Gizmo, el Perro Perdido Durante 9 Años

• Aunque la apariencia de Gizmo había cambiado notablemente durante los años, con un miedo a las sombras, alturas y aves, una cojera y problemas en los ojos y dientes, su propietaria lo reconoció de inmediato.

Redacción / CAMBIO 22

En 2015, Judith Monarrez vivía con sus padres en Las Vegas cuando Gizmo, su perro de dos años, se escapó a través de una puerta defectuosa en el patio trasero de su casa. Durante los nueve años que siguieron, Monarrez no dejó de buscar a Gizmo, a pesar de los cambios en su vida: se mudó a su propia casa, obtuvo un título de maestría en inglés y comenzó su carrera en la educación superior.

El 17 de julio de 2024, un correo electrónico la sorprendió y la hizo colapsar en el suelo de su cocina en lágrimas: Gizmo había sido encontrado vivo. La noticia llegó tras que una mujer encontrara al perro de 11 años y lo llevara al veterinario, donde el microchip de Gizmo fue escaneado, activando la notificación que Monarrez había estado esperando durante casi una década.

Poco después de recibir el correo, Monarrez se dirigió al hospital de animales para reencontrarse con Gizmo. Aunque la apariencia de Gizmo había cambiado notablemente durante los años, con un miedo a las sombras, alturas y aves, una cojera y problemas en los ojos y dientes, Monarrez lo reconoció de inmediato. “Aunque lucía tan diferente, cuando miré en sus ojos supe de inmediato que era Gizmo”, recordó Monarrez sobre su encuentro en la oficina del veterinario.“Y en cuanto mencioné su nombre, él inclinó la cabeza y no dejó de mirarme”.

Este reencuentro coincide con la entrada en vigor de una nueva ordenanza en Las Vegas, que exige que los propietarios de mascotas microchipen a sus gatos y perros a partir del 1 de agosto. Monarrez y su familia ahora se centran en abordar los problemas de saludde Gizmo y en brindarle todo el amor que habían guardado durante todos esos años de separación. A pesar de las dificultades y el sufrimiento que Gizmo ha pasado, para Monarrez, su regreso a casa es nada menos que un milagro.

Fuente: El Imparcial

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