Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 18 de noviembre.- Los sindicatos de Volqueteros “Caja Roja” y “Caja Blanca” respaldan la propuesta del director del Instituto de Movilidad del Estado de Quintana Roo (IMOVEQROO) para contar con una nueva Ley de Movilidad.

El secretario general del gremio Antonio González Notario, manifestó que durante el gobierno de Carlos Joaquín se expuso la necesidad de actualizar la normatividad, pero acusó que no hubo ni interés, ni voluntad política para impulsar cuando menos reformas, por lo que ahora que está sobre la mesa la intención de la actual administración por comenzar a trabajar en una nueva regulación, se sumarán a los trabajos.

“Nosotros siempre nos pronunciamos a favor de que se creará una nueva Ley de Movilidad especialmente porque buscamos que nos amplíen el periodo de vida útil de nuestras unidades e intentamos dialogar con el Imoveqroo, pero nos salió contraproducente, porque solo quiso sancionarnos, no tuvo voluntad política para analizar y consensuar y ahora que nuevamente se plantea, volvemos a decir que necesitamos una nueva Ley, la actual está totalmente desfasada y no contempla modalidades como la del moto repartidor o los moto taxis que requieren ser regulados.”

Señaló que la postura del gobierno del estado para regularizar todas las modalidades del transporte es positiva, por lo que la legislatura deberá analizarlo y trabajar en la iniciativa que se les presente.

El dirigente de los transportistas, precisó que ellos seguirán pugnando porque les autoricen una ampliación del período de utilidad de sus unidades de volteo, ya que la situación económica y los altos costos que representa para cada operador adquirir otro vehículo, es el principal obstáculo para poder actualizar el parque vehicular con el que cuentan, ya sea con unidades nuevas o con menos de diez años de antigüedad, tal y como lo establece la Ley vigente.

“Tenemos aproximadamente 200 unidades en el sur del estado y hay que reconocer que el 90% de ellas no rebasan el límite de años que marca la Ley para poder operar, la mayoría son modelo 1980; pero no tenemos trabajo y por ende, no hay ingresos que permitan solventar la compra de unidades nuevas o de medio uso, el combustible, el mantenimiento y reparación para operar, además del refrendo que tenemos que cubrir por alrededor de 7 mil pesos y una serie de documentos sin sentido, que solo nos afectan más.”

Es por ello que insistió en que serán muy vigilantes cuando se aborde el tema con la XVII Legislatura, para pedir participar y hacer los cambios necesarios, a fin de no afectar a las familias que dependen de esta actividad.

 

lau.beytia@diariocambio22.mx

RHM

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