• Las mascotas también pueden ser parte de los acuerdos legales en un divorcio. Aprende cómo se determina su custodia y qué factores influyen en las decisiones

 

Redacción / CAMBIO 22

“Si tú te vas y yo me voy, ¿con quién se queda el perro?”, dice la canción de Jesse & Joy, en referencia a las mascotas.

Es común que cuando uno tiene pareja, ambos decidan tener una mascota, especialmente perros o gatos.

Lo que no se discute, en principio, es qué pasaría con las mascotas, si algún día, en el futuro, esta pareja se separa.

Ante este panorama, el diputado de Morena, Armando Corona Arvizu, presentó una iniciativa para reformar el Código Civil Federal, con el objetivo de proteger a las mascotas durante los procesos de divorcio.

Esto adiciona el artículo 284 Bis, para asegurar que el bienestar de los animales sea tomado en cuenta al decidir quién se hará cargo de ellos tras la disolución del matrimonio.

Actualmente, “la ley trata a las mascotas como bienes patrimoniales, carentes de autonomía y valor afectivo, lo que crea conflictos legales y emocionales cuando una pareja decide disolver su matrimonio”.

Ahora, esta reforma busca reconocer que las mascotas tienen un rol mucho más importante en la vida emocional de las familias mexicanas.

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La propuesta incluye criterios para que los jueces consideren al asignar la custodia de las mascotas, tales como la relación de afecto y apego, la estabilidad del entorno, y la capacidad económica de los dueños.

Y es que las mascotas son seres sintientes, que merecen un trato digno y su bienestar debe ser asumido con responsabilidad, argumenta la propuesta.

El legislador agregó que “en España, Francia y diversas jurisdicciones de Estados Unidos y Canadá, se han adoptado leyes que consideran el bienestar de las mascotas en los procesos de divorcio, incluyendo aspectos de tutela y régimen de visitas”.

Por ello, destaca la necesidad de que México siga con una tendencia internacional.

Con esta iniciativa, se espera que México adapte su legislación a la realidad social, donde las mascotas son reconocidas como parte fundamental de las familias.

El objetivo es que los animales reciban la atención y el cuidado adecuados durante los procesos de divorcio, reflejando así los valores y el compromiso de nuestra sociedad con el bienestar de las mascotas que, en realidad, son un miembro de la familia.

 

 

 

Fuente: La Lista

redaccion@diariocambio22.mx

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