• Hasta ahora la obra ha utilizado 14 mil millones de pesos del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar >Se habla de atrasos del estudio de preinversión derivados de la expropiación de tierras ejidales

 

Redacción/CAMBIO 22

CHETUMAL, 12 de septiembre.- A pesar de que forma parte de los proyectos prioritarios del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y en 2022 se aplicará la mayor parte de la inversión contemplada para la obra, el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2023 no contempla recursos asignados específicamente para la conclusión del aeropuerto internacional de Tulum, que está a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

 De acuerdo con el PPEF del año siguiente, la edificación de una Base Aérea Militar y un Aeropuerto Internacional en el norte del municipio de Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo, a 21 kilómetros de Tulum, forma parte de los tres programas y proyectos de inversión registrados sin asignación de recursos en el 2023.

La eventual construcción de un aeropuerto civil en la zona maya quintanarroense tiene el propósito, según ha dicho el presidente Andrés Manuel López Obrador, de captar la demanda de pasajeros que llegan a Cancún, pero que su destino principal es el municipio que se encuentra a un par de horas de carretera: Tulum.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) informó que la construcción de la base aérea militar y el Aeropuerto Internacional de Tulum costará 16 mil 331 millones de pesos.

Asimismo, según la dependencia se han invertido más de 13 mil 154 millones de pesos en la edificación de la terminal aérea y la base militar ubicada a 21 kilómetros de Tulum, muy cercano al trazo del tramo 6 del Tren Maya y a menos de 200 km de las principales ciudades de Quintana Roo.

Lo anterior hace suponer que en el 2023 la Sedena requiere un presupuesto de 3 mil 177 millones de pesos para concluir el aeropuerto, previsto para atender a turistas que lleguen a Tulum, Puerto Aventuras, Akumal, Xel-Há, Cobá, Felipe Carrillo Puerto, Bacalar, Majahual y Chetumal.

Sin embargo, este proyecto fue clasificado por la Sedena y por la SHCP en el paquete de programas y proyectos de inversión registrados “sin asignación de recursos en 2023”.

Lo anterior pese a que la obra es considerada prioritaria para “mejorar las operaciones de vigilancia que realiza la Sedena en el área de influencia, tomando en cuenta que no existe infraestructura aeroportuaria en la Riviera Maya capaz de soportar y asistir problemas de seguridad y eventos hidrológicos graves”.

También es considerada obra complementaria del Tren Maya, pues se ubica en el Tramo 6 y tendrá una estación del mismo, además de que desarrollará funciones de vigilancia del espacio aéreo en la frontera sureste y tendría una participación relevante como punto logístico estratégico para prestar apoyo en caso de desastres naturales, operando en forma conjunta con la Secretaría de Marina, integrándose en una instalación militar-naval con infraestructura propia por cada dependencia, según señala el análisis costo-beneficio.

En esa instalación operarían aeronaves de vigilancia, aviones y helicópteros de intercepción, complementados por un sistema de radar.

Incluso, en el diagnóstico del proyecto de construcción la Sedena considera “importante mantener la seguridad en la zona ante la presencia de la delincuencia organizada y eventos meteorológicos”.

Una de las razones que se ha expuesto para que el presupuesto federal no tenga recursos asignados para la conclusión del aeropuerto de Tulum en 2023 es que no se dispone aún de los estudios de preinversión que demanda la Ley de Obras Públicas y Servicios.

Se dice que dichos estudios, que definen la factibilidad del proyecto, con costo de 246.4 millones de pesos y que debieron haberse entregado el pasado 31 de julio de este año, no se han iniciado.

Información de la Dirección General de Ingenieros de la Sedena muestra que el avance de estudios es nulo y no tiene presupuesto para su contratación.

En un oficio a la Subsecretaría de Egresos de la Unidad de In-versión de la SHCP, se argumenta que en la expropiación de los terrenos de ejido de Chunyaxché y Anexos, municipio de Felipe Carrillo Puerto, se ha generado un retraso en la ejecución de los estudios

No obstante, cabe recordar que, en días pasados, Forbes México dio a conocer que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador sacó 14 mil millones de pesos del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar (FPAPEM), un fondo creado durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, para la construcción de una Base Aérea Civil Militar y el Aeropuerto Internacional de Tulum “Felipe Carrillo Puerto”, en Quintana Roo.

La dirección general de la Administración del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar entregó los 14 mil millones de pesos en el último trimestre de 2021.

Dicho Fideicomiso Público fue creado para administrar los recursos, que forman parte del patrimonio de la Sedena, y pagar las erogaciones por las adquisiciones de bienes como equipo militar terrestre, aéreo y refacciones.

El fondo tiene la facultad de contratación de obra pública y de los servicios de mantenimiento necesarios para dichos bienes y obras destinadas a la realización de las operaciones de orden interior y seguridad nacional de carácter urgente de la Sedena.

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el Banco Nacional del Ejército, Fuerza Aérea y Armada y la Secretaría de la Defensa Nacional son los encargados de la administración del dinero.

Y entre las funciones que el presidente López Obrador asignó al Ejército en relación con los proyectos prioritarios de infraestructura está la de proporcionar al Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica, S.A. de C.V., los medios e insumos que pudiera requerir para su constitución y funcionamiento, en cumplimiento de sus actividades.

La construcción del aeropuerto de Tulum consiste en una pista de 3 mil 500 metros de longitud, calles de rodaje de pavimento asfáltico de 10 centímetros de espesor, plataformas para aviación comercial, general y de carga de pavimento asfáltico también de 10 centímetros de espesor, estacionamiento para helicópteros, zona de hangares, señalización y equipo de ayuda a la navegación, en lo que corresponde al lado aire.

Para el lado de tierra, el proyecto considera un edificio terminal a base de concreto hidráulico y una estructura metálica con vestíbulo, sala de documentación, punto de inspección, sala de última espera, salas de reclamo de equipaje, migración, aduana, áreas comerciales y áreas de estacionamiento, y tendría que esperar un año para recibir más presupuesto, si es que no se toman más recursos del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar para concluirlo.

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

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