Se Impone la Impunidad, A un Año del Asesinato del Comisario Ejidal de Laguna Om y su Esposa en Nicolas Bravo

• CAFÉ DE ALTURA

Javier Chávez Ataxca/ CAMBIO 22

Hace un año nos conmocionó 𝐞𝐥 𝐚𝐬𝐞𝐬𝐢𝐧𝐚𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐜𝐮𝐜𝐡𝐢𝐥𝐥𝐨 𝐝𝐞 𝐆𝐮𝐚𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭𝐨 𝐂𝐚𝐚𝐦𝐚𝐥 𝐊𝐮 –𝐜𝐨𝐦𝐢𝐬𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐞𝐣𝐢𝐝𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝐋𝐚𝐠𝐮𝐧𝐚 𝐎𝐦– 𝐲 𝐥𝐚 𝐞𝐬𝐩𝐨𝐬𝐚 𝐞𝐧 𝐬𝐮 𝐯𝐢𝐯𝐢𝐞𝐧𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐍𝐢𝐜𝐨𝐥á𝐬 𝐁𝐫𝐚𝐯𝐨, una localidad próxima a la frontera con Campeche.

Los cadáveres los descubrió Miguel Ángel, quien preocupado por la prolongada ausencia de su hermano Gualberto en la sede ejidal acudió por la tarde a la casa y encontró al hombre inerte en un charco de sangre.

𝐃𝐨𝐧 𝐆𝐮𝐚𝐥𝐛𝐞𝐫𝐭𝐨 𝐲 𝐬𝐮 𝐞𝐬𝐩𝐨𝐬𝐚 𝐞𝐫𝐚𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐟𝐞𝐬𝐨𝐫𝐞𝐬 𝐣𝐮𝐛𝐢𝐥𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐲 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐨𝐧 𝐬𝐨𝐫𝐩𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐝𝐨𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐞𝐥 𝐨 𝐥𝐨𝐬 𝐚𝐭𝐚𝐜𝐚𝐧𝐭𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐚 𝐮𝐧 𝐚ñ𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐝𝐨𝐛𝐥𝐞 𝐚𝐬𝐞𝐬𝐢𝐧𝐚𝐭𝐨 permanecen en el manto de la impunidad, porque la Fiscalía General del Estado aún no reporta avances en su investigación, si acaso la mantiene abierta.

𝐋𝐚 𝐩𝐮𝐞𝐫𝐭𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐡𝐨𝐠𝐚𝐫 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐛𝐚 𝐞𝐧𝐭𝐫𝐞𝐚𝐛𝐢𝐞𝐫𝐭𝐚 𝐲 𝐡𝐚𝐛í𝐚 𝐝𝐞𝐬𝐨𝐫𝐝𝐞𝐧, 𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐝𝐞𝐬𝐝𝐞 𝐞𝐥 𝐢𝐧𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐚𝐥𝐢𝐦𝐞𝐧𝐭ó 𝐥𝐚 𝐡𝐢𝐩ó𝐭𝐞𝐬𝐢𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐫𝐨𝐛𝐨. Peritos de una Fiscalía de primer mundo habrían recopilado evidencias, huellas.

Perteneciente al municipio capitalino de Othón P. Blanco, Nicolás Bravo es una alcaldía que está en la ruta del Tren Maya. Ha sido un lugar apacible y por ello el crimen de la pareja indignó a toda la localidad quintanarroense.

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