► A diferencia de los pescadores, muchos prestadores turísticos no pusieron a resguardo sus navíos y ahora pagan las consecuencias

 

Yolanda Gutiérrez/CAMBIO 22

ISLA MUJERES, Q.ROO, 26 de septiembre.- Se confiaron los prestadores turísticos, no pusieron a resguardo sus embarcaciones y, como resultado, decenas de lanchas se hundieron y sus propietarios se enfrentan ahora a cuantiosas pérdidas económicas.

  

Mientras los pescadores, con la experiencia de los años, se aprestaron a poner a resguardo sus embarcaciones mucho antes que la gobernadora declarase Alerta Roja para Isla Mujeres, gran parte de los náuticos se confiaron y creyeron que, al igual que sucedió con Beryl, el huracán Helene tampoco dejaría grandes afectaciones.

No faltó quien intentó responsabilizar al Gobierno del Estado por haber decretado la Alerta Roja ya casi con el fenómeno encima, olvidando que la cultura de prevención es de todos y, como ejemplo, la pronta respuesta del sector pesquero para proteger su fuente de trabajo y sustento de la familia.

Enfrentarán severas pérdidas económicas los propietarios de lanchas que, por suponer que Helene no “pegaría duro”, se limitaron a amarrar más sólidamente sus embarcaciones en los atracaderos y muelles que utilizan habitualmente, con el resultado de al menos 20 botes afectados en mayor o menor grado.

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

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