Recordando a la Virgen de Guadalupe

• Así nos Vemos

Edgar Prz/ CAMBIO22

Desde hace algunas semanas la romería Guadalupana dio inicio. Este País es mayoritariamente católico, devoto y adorador en suma de su Patrona, de su Excelencia, de la adorada Virgen de Guadalupe..
Desde infantes nos enseñan los diálogos, las imágenes, las apariciones furtivas, las visicitudes, las sorpresas, toda la trama que se desarrollo en el Cerro del Tepeyac. Desde las epopeyas del Pastorcito Juan Diego hasta las cartas del Obispo y la intermediación que hubo para dar crédito a las apariciones de la Virgen..

Hace aproximadamente 493 años, en Diciembre de 1531 la Virgen se le apareció al indígena Juan Diego y le pidió de favor le construyeran un templo en ese lugar, el Cerro del Tepeyac. Presuroso acudió a decirle al Obispo Fray Juan de Zumárraga y el lo escucho con atención y le pidió una prueba, un testimonio que diera certeza a lo que decía Juan Diego.

En su segunda aparición, la Virgen le ordenó que cortará flores del lugar y se las llevara al Obispo. Al llegar con el encargo, abrió la capa donde venían envueltas las flores y ambos se maravillaron de lo que vieron, milagrosamente apareció una imagen de la Virgen y desde entonces se venera con el nombre de Nuestra Señora de Guadalupe.

La imagen de la Virgen se convertido en símbolo de unión, de fraternidad, de lucha y ha amalgamado intereses disímbolos que al final encuentran coincidencias. Su inspiración le sirvió a nuestros héroes de la independencia, recordemos que Hidalgo y Morelos usaban su figura como estandarte para protección y motivar a la lucha contra la opresión a que estaban sometidos. Su manto protector siempre ha cubierto los sueños e ilusiones de millones y millones de mexicanos, pero además ya es una figura latinoamericana. Es más hasta el carismático Papa Juan Pablo acudió a rendirle pleitesía.

Su presencia es parte inseparable de toda esta nación, se le adora, se le venera, se le respeta, se le cuida y por ello, año tras año, miles de peregrinos hacen sus “mandas”, promesas” y las cumplen visitándola en todos los recintos dónde reposa su imagen. No les importa, menos les interesan correr los riesgos para cumplir su petición y su promesa, las carreteras se ven llenas de peregrinos sin edad, jóvenes, mujeres, niños, todos participan como señal de agradecimiento por la vida, por la salud, por el trabajo.

Recorren kilómetros cargando sus imágenes, padeciendo las inclemencias del tiempo, hacinados en coches, camionetas, descansando por momentos en la cama de los vehículos. El sufrimiento por esas horas viene incluido, pero es nada ante la felicidad de saber que estás cumpliendo, que estás respondiendo agradecido por las bendiciones recibidas con tu familia, con tus padres, tus hijos, tus amigos y todo aquel que representa algo para uno..

Es lo mágico de su presencia, no se ve pero se siente. No hay como la salud del alma, del espíritu y cultivar siempre una esperanza de ser mejor y nunca perder el ser agradecido. Hoy es una fiesta nacional, rezos, comidas, fiestas, momentos de convivencia, de celebración, de gozo, de unión, de fraternidad y darle gracias a la Virgen de Guadalupe por todos los favores recibidos. Es tiempo de devoción al estar la Virgen conectada en todas las actividades de la vida, en nuestro diario caminar y sentir que no se está solo, que te protege y te cuida. Felicidades y que siga latiendo nuestro corazón con la intensidad de brindarte cariño y gratitud. Acaso no estoy yo aquí que soy tu Madre, palabras que encierran un manto protector y si uno está con la Virgen, quién estará contra ti….

Los Mayas también somos Católicos… Mejor seguiré caminando y cantando “En el cielo una hermosa mañana, en el cielo una hermosa mañana, la Guadalupana, la Guadalupana bajo al Tepeyac”

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LRE/MA