¿Realmente Caduca el Agua Embotellada? Mitos y Realidades Sobre su Fecha de Vencimiento
13 Mar. 2025
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Expertos explican cómo factores como el almacenamiento y el tipo de envase pueden influir en la calidad del agua, aunque no caduca como los alimentos
Redacción / CAMBIO 22
Al comprar agua embotellada, es común notar que en la etiqueta aparece una fecha de caducidad o de consumo preferente. Esto genera dudas entre los consumidores: ¿realmente el agua caduca o sigue siendo segura para beber después de esa fecha?
Expertos en salud y normativas alimentarias han explicado que, aunque el agua no se descompone como los alimentos, su almacenamiento y el material del envase pueden influir en su calidad con el tiempo.
¿Realmente el agua embotellada caduca?
De acuerdo con la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), el agua embotellada no tiene una fecha de vencimiento estricta, ya que no es un medio favorable para el crecimiento de bacterias o moho.
Sin embargo, la fecha impresa en la etiqueta indica el período en el que el agua mantiene su mejor sabor y calidad.
El problema radica en el envase. Con el tiempo, el plástico de las botellas puede liberar sustancias químicas al agua, especialmente si ha estado expuesto a temperaturas altas o almacenado en condiciones inadecuadas. Esto puede alterar el sabor y, en algunos casos, afectar la seguridad del líquido.
¿Cuánto tiempo se puede consumir el agua embotellada con seguridad?
La FDA y otros organismos de salud recomiendan consumir el agua embotellada dentro de los dos años posteriores a la fecha de la etiqueta para garantizar su mejor calidad. No obstante, la clave para mantener su pureza está en el almacenamiento adecuado.
Para evitar que el agua pierda calidad, es recomendable:
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Guardarla en un lugar fresco y oscuro, lejos de la luz solar y fuentes de calor.
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No reutilizar botellas de plástico de un solo uso, ya que pueden liberar microplásticos.
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Mantener la botella cerrada una vez abierta y consumirla en pocos días.
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En el caso de los garrafones, si se almacenan correctamente y sin exposición a la luz o el calor, pueden conservarse por semanas o incluso meses.
Sin embargo, una vez abiertos, se recomienda consumirlos en un máximo de 10 a 15 días para evitar contaminación por microorganismos.
El agua embotellada no se caduca como otros productos, pero su calidad puede verse afectada por el tiempo y las condiciones de almacenamiento.
Para garantizar su seguridad, es importante revisar no sólo la fecha en la etiqueta, sino también cómo y dónde se ha conservado.
Fuente: Excelsior
GPC/AGF