Preocupa el Incremento de los Sin Religión a la Iglesia Católica

Rafael García/CAMBIO 22

Cancún, Q. Roo a 19 de diciembre.- Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, obispo de la Diócesis Cancún-Chetumal, se mostró preocupado por el incremento de las personas que no tienen religión (los sin religión) en Cancún y Quintana Roo, quienes inventan sus propias creencias.

“Hay unos datos del INEGI muy preocupantes, sobre todo en Quintana Roo y en Cancún, resulta que el avance de otras religiones en la última década ha disminuido, pero lo que se ha duplicado son los sin religión, quienes si creen, pero tienen sus propias creencias; ellos dicen yo me voy a cargar de energía, aquí tengo mi cuarzo, y crean su propia religión, no son ateos son “yoteos”; yo soy mi Dios, yo me hago mi Dios, yo no creo es eso, yo no necesito una iglesia oficial; ese es algo muy serio, pero yo creo que es una moda”, reconoció el obispo en el desayuno con los medios de comunicación con el motivo de las fiestas decembrinas.

Cuestionado sobre el regreso de sus feligreses a las iglesias, Elizondo Cárdenas reconoció que en el tema de participación y en lo económico la recuperación ha sido muy lenta después de la pandemia, sobre todo en los grupos de apostolados los que se han visto diezmados, pero reconoció que se está trabajando arduamente para que vuelva la membrecía, lo que ha generado que regrese el 80 por ciento, por lo que esperan que sean el 2024 cuando se logren el cien por ciento.

“Los únicos que han logrado el 100 por ciento de regreso de feligreses es el santuario de María Desatadora de Nudos y el Santuario de la Virgen de Guadalupe, así como otras iglesias, pero la mayoría se mantiene al 80 por ciento, pero los que regresan lo hacen con más fe porque lo necesitan, ahora es más autentica la fe”, admitió. 

Cabe destacar, que el obispo al inicio de la reunión reconoció la gran participación de la gente, la cual se opuso a la intensión de la Suprema Corte de Justicia de evitar los nacimientos en los espacios públicos y que lograron que el dictamen se aplazara.

“Hubo mucha gente muy indignada que dijo, porque nos quieren quitar nuestras tradiciones, fiestas, posadas, piñatas y nacimientos, esto es un derecho humano de expresar nuestras fe, tener libertad de pensamiento, de expresión, de conciencia y de religión; eso no lo da el estado, no es una concesión, estos son derechos que están antes del estado y de las leyes”, declaró.

Finalmente; el obispo bendijo a los comunicadores, y a sus familias, que asistieron al desayuno para que sigan ejerciendo su profesión, su trabajo con mucha honestidad y sean servidores de la verdad para que hagan llegar el mensaje sano y limpio a todos sus oyentes.

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RHM