Pleito de Layda y Alito es una Competencia Entre Corruptos: Líder Indígena

• Inexplicable la enorme riqueza de Alejandro Moreno Cárdenas, “pero Layda Sansores no se queda atrás”, Ku Chan

Redacción / CAMBIO 22

San Francisco de Campeche, Cam., 3 de octubre.- Al dar su opinión sobre la confrontación mediática que protagonizan el senador Alejandro Moreno Cárdenas y la Gobernadora Layda Sansores Sanromán, misma que se agudizó a raíz de que ésta expropio varios predios a la familia del priista, el Líder Supremo Maya, Filiberto Ku Chan afirmó que lo que estamos observando “es una competencia para ver quién es el más corrupto”.

“Desde luego que es inexplicable la acumulación de riqueza por parte del Senador y exgobernador Alejandro Moreno Cárdenas, a quien se le adjudica la propiedad de predios de gran plusvalía, entre ellas la mansión de Lomas del Castillo y el terreno de playa de Champotón”.

“Aunque como Gobernador y legislador federal Alito ha obtenido excelentes ingresos, estos resultarían insuficientes para adquirir semejante patrimonio”, dijo
Ku Chan.

Sin embargo, afirmó que Layda Sansores Sanromán no se queda atrás, pues es la heredera de Carlos Sansores Pérez, “El Negro”, quien -dijo- no necesitaba reformar ninguna ley de expropiación para quitarte tu terreno, “simplemente lo arrebatada”.

El líder indígena consideró que la familia de Sansores Sanromán “se sirvió con la cuchara grande en cuando a la acumulación de terrenos se refiere, porque en esos tiempos bo había límite”.

“Todos en Campeche sabemos la manera de cómo adquirió Carlos Sansores el predio de playa llamado San Lorenzo, mismo que actualmente es para el disfrute exclusivo de la familia Sansores”.

“Hoy grande parte de los cerros que rodean la parte antigua de la ciudad ya están habitados; gran parte de ellos también pertenecían a la familia de Layda, quien sin lugar a dudas es una de las políticas más ricas de la Península”, destacó Ku Chan.

Consideró como muy vergonzoso lo que está ocurriendo en el país, en donde “los políticos tienen una gran debilidad por la acumulación de riqueza, pero sobre todo de bienes inmuebles”.

“Ahí tenemos a Fernández Noroña, quien presumía contar con una honradez y honorabilidad a toda prueba, pero ahora resulta que también es poseedor de un enorme patrimonio, cuando todo México sabe que no tenía ni para comer”, puntualizó.

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