•  Un espacio que invita a descubrir su riqueza arqueológica e histórica a través de senderos bien delimitados y señalización clara.

 

Miguel Ángel Fernández/ CAMBIO 22

CALDERITAS, 29 de noviembre.- El pasado lunes la Zona Arqueológica de Oxtankah, ubicada en las cercanías de Calderitas, Quintana Roo, reabrió sus puertas al público tras un extenso trabajo de restauración e infraestructura liderado por el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), una iniciativa del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Este esfuerzo busca revitalizar sitios emblemáticos en el área maya, incorporando mejoras que no solo preservan el patrimonio cultural, sino que también mejoran la experiencia de los visitantes.

Un acceso que cautiva desde el principio

Desde la carretera hacia Calderitas, el recorrido hacia Oxtankah se encuentra enmarcado por un muro de bienvenida y un camino rodeado de vegetación que lleva a la moderna unidad de servicios. Este espacio incluye estacionamiento, taquillas, y un diseño que combina funcionalidad con respeto al entorno natural. La entrada tiene un costo accesible de 75 pesos, y ofrece gratuidad para menores de 13 años, estudiantes y profesores.

Historia viva en cada rincón

El recorrido por Oxtankah, de aproximadamente una hora, invita a descubrir su riqueza arqueológica e histórica a través de senderos bien delimitados y señalización clara. La experiencia cobra vida en lugares como la Plaza Abejas, hogar del único mascarón de estuco modelado que permanece in situ, representando un jaguar estilizado, símbolo del Witz o cerro sagrado para los antiguos mayas.

Uno de los elementos más impactantes es la capilla colonial del siglo XVI, testigo del mestizaje entre la cultura maya y los conquistadores europeos. Restaurada con minuciosidad, esta estructura es mucho más imponente en vivo de lo que muestran las fotografías.

El legado de Gonzalo Guerrero

Según la tradición oral, Oxtankah habría sido hogar de Gonzalo Guerrero, considerado el “Padre del Mestizaje”, quien adoptó la cultura maya y murió defendiendo a su pueblo adoptivo. Este relato, junto con los vestigios arqueológicos encontrados, refuerza la importancia histórica de este sitio.

 

Un modelo de revitalización cultural

El programa Promeza no solo ha revitalizado a Oxtankah, sino que también trabaja en otros 27 sitios arqueológicos asociados a la ruta del Tren Maya. Además de preservar monumentos, la iniciativa contempla la creación de museos, Centros de Atención a Visitantes (Catvi), senderos y señalización actualizada.

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

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