Mujer Denuncia Violencia Vicaria y Acoso

► Una pareja sentimental de funcionarios públicos son señalados de estos actos, una policía y el otro trabajador de la API

Ricardo Jesús Rivas/CAMBIO 22

CHETUMAL, 12 de marzo. – A través de redes sociales, Yasuri S., con el respaldo de la colectiva feminista Marea Verde Quintana Roo, denunció que enfrenta una serie de demandas impulsadas por su expareja, Roberto Carlos F. G., trabajador de la Administración Portuaria Integral (API) de Quintana Roo, con el presunto apoyo de su actual pareja, Sandra Patricia C. D., quien, según su testimonio, es policía y abogada.

En su denuncia pública, Yasuri S. expuso que su expareja evita asumir responsabilidades en la crianza de su hija, limitándose únicamente a la pensión alimenticia que le es descontada por nómina. Relató que recientemente se negoció a comprar los lentes de la menor, lo que la motivó a buscar asesoría y hacer pública su situación. Sin embargo, asegura que cualquier intento de exponer la falta de compromiso del padre de su hija ha sido censurado, con publicaciones eliminadas y nuevas demandas interpuestas en su contra.

La madre afectada, acusó al juzgado de presionarla para que deje de “molestar” a Roberto Carlos F. G., y su actual pareja, pese a que, según su versión, no ha tenido contacto con ellos ni interferido en sus vidas. En su publicación, expresó su hartazgo por la manera en que su hija es manipulada, pues asegura que su padre la desacredita constantemente ante la menor, diciéndole que su madre le impide verlo, cuando en realidad —afirma— su expareja ha mostrado un desinterés total por la crianza y bienestar de la niña.

Ante este panorama, la denunciante exigió que las autoridades investiguen la situación en lugar de seguir admitiendo demandas en su contra, pues considera que estas acciones son una estrategia de violencia vicaria que busca desgastarla emocional y económicamente. Además, señaló la necesidad de un verdadero compromiso de las instituciones para garantizar la protección de las madres que enfrentan este tipo de acoso legal y la responsabilidad de los padres en el cumplimiento de sus obligaciones parentales.

El caso produce indignación en redes sociales, donde diversas usuarias y colectivos feministas expresaron su solidaridad con Yasuri S. y han reiterado la urgencia de atender la violencia vicaria en Quintana Roo, una problemática que sigue sin recibir la respuesta adecuada por parte de las autoridades judiciales y de seguridad.

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