Mota-Engil Continúa con Pruebas del Tren Ligero

Redacción / CAMBIO 22

San Francisco de Campeche, Cam., 3 de noviembre.- La empresa Mota-Engil México continúa con pruebas del Tren Ligero de Campeche, obra de más de 5 mil millones de pesos, que según lo programado debió ser inaugurada este fin de año, pero sufrió retrasos al quedar atrapada enmedio de la confrontación política entre el Gobierno del Estado, de Morena, y el Ayuntamiento de Campeche, en manos de Movimiento Ciudadano (MC).

Este fin de semana se observó en funcionamiento a la unidad de prueba, misma que recorrió el tramo comprendido desde Héroe de Nacozari hasta el Periférico Pablo García y Montilla. Cuando la obra fue anunciada se afirmó que la obra, cuyo propósito principal es conectar a la ciudad con la estación del Tren Maya, se dijo que estaría lista antes de que finalizara el presente año, sin embargo, el 16 de mayo el Ayuntamiento de Campeche, en manos del partido MC, clausuró los trabajos por carecer de los permisos de construcción.

Ante esta situación el Gobierno del Estado, cuya titular es Layda Sansores San Román, de MORENA, mismo que mantiene una confrontación política con la emecista comuna campechana, reformó en julio pasado la Ley de Obras Públicas del Estado de Campeche para que construcciones oficiales, como la del Tren Maya y el Tren Ligero, no tengan que cumplir con los requisitos estatales y municipales, como los de impacto ambiental y afectación a la traza urbana.

La sanción fue levantada el 17 de julio del año en curso, por lo que ahora la conclusión de los trabajos ha sido reprogramda hasta abril del 2025, aunque se presume que será inaugurado en enero de ese año.

EL TREN QUE NO ES TREN

Originalmente el Gobierno Federal anunció la construcción de un Tren Ligero, un sistema de transporte ferroviario con características similares al de un tranvía, pero se terminó cambiando por tiempos y costos a ser un modelo de autobús guiado tipo ART, que circulará sobre una vía restringida. El proyecto ha sido objeto de diversas críticas, sobre todo porque los trabajos han sido bastante invasivos e implicaron afectaciones a la vialidad, además de que su costo es considerado como demasiado elevado.