Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 4 de noviembre.- La Laguna de los Siete Colores de Bacalar, representa el principal atractivo turístico del Pueblo Mágico que atrae a cientos de turistas que arriban durante todo el año a este destino de la zona sur del estado.

Sin embargo, ante el paso del huracán “Lisa” y las lluvias que ocasionó en la Península, los prestadores de servicios turísticos se encuentran a la expectativa de que el cuerpo lagunar no presente un cambio en sus tonalidades características, como consecuencia de posibles escurrimientos pluviales que se registran en esta parte del estado y que ocurre durante la época de lluvias.

Aunque esta situación es natural y ocurre en varias ocasiones, el temor es que esto pueda afectar la afluencia de visitantes a este centro vacacional en el próximo puente vacacional que habrá en noviembre, de acuerdo a lo que declaró el presidente del Comité de Pueblos Mágicos Nicanor Piña Ugalde.

“Lo primero que hay que dejar en claro, es que no sería la primera ocasión que sucedería y eso lo sabemos quienes somos nativos de la región, cuando hay lluvias intensas aquí o en los estados de Tabasco o Campeche se producen escurrimientos que provocan un cambio de color en la laguna, pero es un comportamiento natural y luego solita la laguna recupera sus tonalidades; nos preocupa un poco porque pues al enturbiarse el agua podría dar una mala imagen del destino y frenar la llegada de turistas el siguiente puente, por eso estamos al pendiente y con monitoreo permanente.”

Indicó que de acuerdo con los expertos en la materia, el cambio de color ocurre cuando las lluvias provocan el descenso de las partes altas de miles de metros cúbicos de corrientes de agua hacia la laguna, el estero de Chac, el río Hondo y la Bahía de Chetumal por el desnivel natural, pero dijo, a veces es leve y la recuperación de la laguna es rápida.

Aseveró que esto siempre es aprovechado por grupos pseudo ambientalistas para viralizar información errónea sobre el cambio de color, por lo que todos los prestadores de servicios turísticos, trabajan de manera unida y coordinada para desmentir a quienes solo buscan adueñarse de la laguna.

“Hay quienes lo único que buscan es dañar al destino, no sería la primera vez que difundan información falsa asegurando que la laguna pierde sus tonalidades a causa de la contaminación, buscando alejar al turismo y concretar su idea de hacer un área natural protegida y manejarlo ellos; es gente que no es de aquí y desconoce el comportamiento de la laguna ante ciertos fenómenos, los más preocupados de su conservación y de su protección somos quienes aquí vivimos por eso la cuidamos.”

 

En estos momentos, la ocupación hotelera se encuentra en un 35% lo que apenas les permite sacar los gastos de operatividad, por lo que esperan ansiosos las reservas para fin de año, ya que auguran, cerrarán el 2022 con un 90% y con utilidades.

 

lau.beytia@diariocambio22.mx

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