• La infraestructura ferroviaria del país se expande con nuevas líneas para conectar las principales ciudades de México, impulsadas por la nueva administración federal.

 

• Conectividad entre regiones, una promesa de Sheinbaum

 

 

 

Renán Gabriel Castro Hernández/ CAMBIO 22

La llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de México trae consigo una serie de proyectos ambiciosos, entre los cuales destaca la expansión de la red ferroviaria del país. El plan, denominado ‘100 pasos para transformar México’, busca impulsar el desarrollo regional y nacional a través de trenes de pasajeros. Entre las iniciativas más importantes se encuentra la construcción del Tren Ciudad de México-Guadalajara, uno de los proyectos más esperados en la agenda de infraestructura de la nueva presidenta.

Tren Ciudad de México – Guadalajara: 581 kilómetros de conectividad

La construcción del Tren Ciudad de México-Guadalajara lleva varios años en planeación, pero finalmente se vislumbra su ejecución. Este proyecto contará con una extensión de 581 kilómetros, conectando a la capital del país con la ciudad de Guadalajara en un recorrido que se estima dure aproximadamente cuatro horas. El trazado del tren incluirá estaciones en ciudades estratégicas como Querétaro, Salamanca e Irapuato, permitiendo no solo una mayor conectividad, sino también el impulso económico en las zonas aledañas.

Nuevas rutas: AIFA-Pachuca y México-Monterrey

El Tren Ciudad de México-Guadalajara no es la única línea ferroviaria planeada. Se han anunciado otras importantes rutas como el Tren AIFA-Pachuca y el Tren México-San Luis Potosí-Monterrey-Nuevo Laredo. Estos proyectos buscan descongestionar las carreteras y ofrecer una alternativa rápida y eficiente de transporte entre las principales ciudades del norte del país. En total, se espera construir más de 3,000 kilómetros de vías férreas para trenes de pasajeros.

Infraestructura de calidad con trenes eléctricos

Una de las características principales de los trenes que serán construidos bajo esta administración es que seguirán el modelo del Tren Maya, utilizando trenes eléctricos. Esto permitirá una reducción significativa en la huella de carbono, alineando los proyectos con los compromisos internacionales de sostenibilidad y energías limpias. Además, el diseño de las vías y estaciones será desarrollado en conjunto con ingenieros militares y empresas privadas, garantizando la viabilidad y eficiencia de las rutas.

Impacto económico y social en las regiones

El impacto que estos trenes tendrán en las regiones por donde pasen es incalculable. Se espera que, además de mejorar la movilidad, impulsen el desarrollo económico al facilitar el acceso a mercados y centros urbanos, así como fomentar el turismo. En el caso del Tren Ciudad de México-Guadalajara, la creación de estaciones en ciudades como Querétaro y Salamanca permitirá la integración de más personas a la economía nacional, especialmente en sectores industriales y comerciales.

Retos en la implementación del proyecto

Uno de los mayores desafíos que enfrenta la administración es la adquisición y adaptación de los derechos de vía necesarios para la construcción de las nuevas líneas. Actualmente, la mayoría de las vías férreas en México están concesionadas para el transporte de carga, por lo que se están llevando a cabo negociaciones para permitir el paso de trenes de pasajeros. Otra opción que se contempla es la creación de infraestructura completamente nueva, lo que significaría una inversión aún mayor, pero con beneficios a largo plazo.

El papel de la inversión privada en el proyecto

El éxito de estos trenes no solo dependerá del apoyo gubernamental, sino también de la inversión privada. Empresas nacionales e internacionales han mostrado interés en participar en el financiamiento y construcción de las vías y trenes. La colaboración entre el sector público y privado será clave para acelerar los tiempos de construcción y asegurar la calidad de la infraestructura.

Un modelo de transporte para el futuro

Estos nuevos trenes no solo mejorarán la conectividad entre las principales ciudades de México, sino que también establecerán un nuevo estándar en el transporte de pasajeros. Con velocidades de hasta 160 kilómetros por hora, estos trenes no solo ofrecerán comodidad y rapidez, sino que también contribuirán a la descarbonización del transporte, alineándose con las tendencias globales hacia un transporte más sostenible.

🚆✨ En este video recordamos el compromiso de Claudia Sheinbaum con sus ambiciosos proyectos de trenes de pasajeros para su sexenio:
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🛤️ AIFA – Pachuca
🛤️ CDMX – Querétaro – Guadalajara – Nogales
🛤️ CDMX – San Luis – Monterrey – Nuevo Laredo
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¡Movilidad conectada para un… pic.twitter.com/4L0uc9wV4C

— Diario CAMBIO 22 (@DiarioCAMBIO22) September 21, 2024

Proyección hacia el 2030

Con la conclusión de los proyectos planeados para el 2030, México se posicionará como uno de los países líderes en infraestructura ferroviaria en América Latina. La culminación de las líneas de tren anunciadas por la presidenta Sheinbaum no solo mejorará la movilidad de millones de mexicanos, sino que también servirá como un motor de desarrollo económico, conectando regiones que históricamente han estado marginadas del crecimiento industrial del país.

 

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LRE