La Voluntad Popular Sale Sobrando en Quintana Roo

• Columna Necesariamente Incómoda

Graciela Machuca Martínez/ CAMBIO22

Con un enroque político previsto y negociado desde hace meses se reconfiguró el escenario en Quintana Roo para las elecciones estatales de 2027, porque con el apoyo que recibe desde la cúpula de MORENA, en el Senado y en la Cámara Federal de Diputados, la exsenadora Maribel Villegas, asumió la diputación federal del Distrito 02 que comprende municipios de la zona maya, aunque ella resida oficialmente en Cancún, municipio que sueña gobernar, pero que las coaliciones partidistas no se lo han permitido.

Los intereses políticos y económicos en el estado y desde el centro son más fuertes que su voluntad, sin embargo, al contar con una curul y ser parte de uno de los grupos políticos más poderosos dentro de MORENA nacional y en el Congreso de la Unión, la convierte en una pieza clave en el ámbito nacional.

La clase política en México desprecia el voto popular, porque valen más sus intereses que la voluntad del pueblo, ya se le hizo costumbre que a la zona maya mandan a sus comodines, como sucedió en la Legislatura Federal pasada cuando impusieron como diputada federal a la hoy senadora de la república, a la supuesta “indígena” Anahí González, a pesar que su credencial de elector tenía el domicilio de Cancún.
En los partidos políticos se desgarran las vestiduras cuando se trata de defender, en el discurso, los derechos del pueblo maya, pero a la hora de respetarlos, garantizarlos y defenderlos, allí es cuando salen a relucir los compromisos, el pago de cuotas y la representación popular que establece la Constitución queda en pura ilusión.

En las elecciones pasadas, la hoy diputada con licencia, Elda Xix Euán, fue la candidata más votada en todo Quintana Roo, resultando electa como diputada federal del Distrito 2, porque el electorado votó por una mujer indígena originaria de una comunidad maya, hablante del maya, cuyo perfil dista mucho del que presumió Anahí González, al tener que adjudicarse de manera ilegal e ilegítima la afirmativa indígena para registrarse como candidata al Senado.

Sin embargo, días antes de la elección, le informaron que iría como su suplente, nada más y nada menos que la exsenadora Maribel Villegas, quien terminaría siendo la diputada propietaria, porque Elda pediría licencia por motivos de salud o a cambio de un puesto en el gobierno del estado, lo único que la dejaron negociar es irse a la Secretaría de Educación Pública, cargo del cual tomó protesta este 3 de noviembre, mientras que Maribel, un día antes asumió la titularidad de la diputación federal por el Distrito 2 de Quintana Roo.

La voluntad popular del pueblo maya pasó a segundo término entre la clase política, la cual decidió que a los mayas los debe representan en el Congreso de la Unión una mujer que no es indígena maya y tampoco habla el maya, a pesar que hay miles de mujeres que pueden representar al distrito en la cámara federal de diputados, porque sienten en carne propia las necesidades del pueblo, las hay profesionistas, bordadoras, profesoras, investigadoras, empresarias, pero como ellas no forman parte del círculo privilegiado de políticos como Ricardo Monrreal, no las contemplaron para ser suplente de la doctora en Educación Elda Xix Euán.

Durante la reciente visita de Luisa Alcalde, dirigente nacional de MORENA, a Quintana Roo se le oyó decir que para el 2027 la oposición saldría del mismo cuerpo de MORENA, por lo que se avecina un ruptura entre el Partido Verde Ecologista de México y el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), que junto con el Partido del Trabajo hoy aún integran la llamada Cuarta Transformación que diseñó Andrés Manuel López Obrador, quien no está de acuerdo en que su herencia se la dispute su descendencia con el acomodaticio Partido Verde.

La reaparición de Maribel Villegas en la escena política nacional, es un mensaje que desde la actual dirigencia de MORENA y quienes toman las decisiones transcendentales de ese partido, no están dispuestos a darle más alas al Partido Verde y a todo aquel que se identifique con ese proyecto. La nueva dirigencia de MORENA está convencida que a estas alturas ya no necesita al Verde para ganar elecciones y porque a la hora de la repartición se llevan más de lo que en realidad vale su trabajo.

El pragmatismo de López Obrador para quedarse con el mayor número de votos llevó al empoderamiento del Partido Verde, cuyo descrédito no le abona a favor del gobierno de la presidenta de la república Claudia Sheinbaum Pardo, por lo que ha llegado el momento de romper relaciones y congelar a toda aquella persona que quiera negociar o espantar con el petate del muerto por identificarse con el Verde. Quienes quieran reivindicarse con la nueva dirigencia de MORENA y con la presidenta, tendrán la oportunidad, siempre y cuando se deslinden del partido que usufructúa Jorge Emilio González y socios.
Desde luego que a Maribel Villegas le dará el tiempo para llegar vigente a finales de 2026 cuando se decida quien contenderá por MORENA a la gubernatura, quizás su capital político en la entidad no le dé para participar como candidata, pero si formará parte de quienes tomarán las últimas decisiones.

Al llegar Maribel a la Cámara Federal de Diputados causa mucho nerviosismo entre quienes ya se sentían “seguros” para llegar a la final, ahora tendrán que trabajar el doble, si quieren que la dirigencia nacional los tomen en cuenta, aunque sea para dar el show preelectoral.

Para el 2027, como lo tiene claro Luisa Alcalde, la disputa estará dentro de MORENA, la incidencia del Verde, si aún permanece en la coalición de la 4T disminuirá drásticamente a la hora de repartir presidencias municipales, diputaciones locales y federales, así como durante el proceso de selección de la persona que jugará por la gubernatura, quien caminará durante el proceso electoral como caballo de hacienda, porque la oposición PAN, PRI y PRD ha desaparecido en Quintana Roo y quien se atreva a salir por Movimiento Ciudadano tendrá que sortear el riesgo de que le saquen a relucir sus deudas con la justicia, como ya ocurrió en el estado.

Durante la reestructuración a la que será sometida MORENA en Quintana Roo saldrán a relucir las anomalías que ha cometido la actual dirigencia estatal, la cual en la práctica tuvo que ser relevada directamente por la gobernadora y el expresidente de la república, quienes sacaron adelante la elección en municipios como Tulum, Chetumal y Felipe Carrillo Puerto, en donde, de hecho, se perdió la elección, a pesar del triunfo institucional.

Quienes integran la clase política gobernante saben muy bien cuáles son los números reales, los cuales les aseguran una derrota segura para 2027 si no cambian estrategias como cambiar a la deficiente dirigencia estatal, así como a las presidentas municipales de Chetumal y Felipe Carrillo Puerto y al munícipe de Tulum, quienes le estorban al proyecto de López Obrador para llevarse el carro completo para las próximas elecciones.

Para que MORENA asegure el triunfo para el 2027, no solo tiene que reconstituirse internamente, sino, además, tiene que disminuir la violencia, no en el discurso, sino en los hechos; también tiene que replantear su relación con gremios como el de los taxistas, a quienes les han quitado poder político en municipios como en Tulum y Cancún, lo cual podría ser contraproducente a la hora de ir a las urnas.
Recordemos que el gobierno de López Obrador dejó destruidas las carreteras de la entidad después de la construcción del Tren Maya, obra multimillonaria que no ha sido concluida y no se sabe para cuando; las expropiaciones de terrenos ejidales y privados es otra espinita que la sociedad tiene pendiente de sacar.

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