La política y sus Demonios
22 Ene. 2025
Felipe Hernández / Cambio 22
La delegación que encabeza la gobernadora Mara Lezama en la FITUR es tan numerosa y ostentosa como las de Joaquín Hendricks, Félix González, Roberto Borge o Carlos Joaquín en su momento. En el discurso hay austeridad republicana; en los hechos hay derroche imperial (Participación en Bahía 99.7 Noticias, en Radio Bahía 99.7 FM y sus redes sociales)
¿Alguien sabe dónde quedó la austeridad republicana? ¿Alguien sabe si en algún momento se aplicó en Quintana Roo? Quizá esté vigente en el discurso. Pero sólo ahí. En los hechos nada ha cambiado en el gobierno estatal y los gobiernos municipales, donde el derroche y la parafernalia del poder están más presentes y más fortalecidos que nunca. Han cambiado las siglas de los partidos en el gobierno para que todo siga igual.
No importa si las siglas dicen PRI, PAN, PRD o Morena. La pafernalia y el derroche son iguales. El tema viene a colación por la enorme, obesa, delegación quintanarroense que ahora vacaciona en España con el pretexto de la Feria Internacional de Turismo, la llamada FITUR.
La delegación que encabeza la gobernadora Mara Lezama es tan numerosa y ostentosa como las de Joaquín Hendricks, Félix González, Roberto Borge o Carlos Joaquín en su momento. En el discurso hay austeridad republicana; en los hechos hay derroche imperial.
A los funcionarios de turismo y de promoción, que deberían ser los únicos presentes, se suman innecesariamente los propios presidentes municipales, senadores, diputados, asistentes personales y hasta invitados ajenos al turismo. Desde luego, todos con gastos pagados con recursos del erario, con dinero de los contribuyentes.
No hay nuevo ni viejo acuerdo que acabe con el derroche imperial.
Mientras las ciudades acumulan carencias; mientras la inseguridad y la violencia crecen, las autoridades estatales y municipales y sus respectivos séquitos vacacionan y viven su cuento de hadas. Para ellas y ellos no hay austeridad, no hay carencias. Para ellas y ellos hay un mundo rosa de abundancia. El pretexto de la promoción turística es útil para vacacionar con todo pagado con los recursos públicos.
Sería un buen ejercicio de transparencia que a su retorno de Madrid informaran a la ciudadanía cuánto le costó al erario la obesa y derrochadora delegación y las actividades de cada participante. La austeridad republicana vive en los discursos grandilocuentes. En la realidad el derroche es imperial.
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