La Identidad de Cancún

Jorge González Durán/CAMBIO 22

La identidad de Cancún está en el espíritu de sus habitantes, de los que aquí ya tienen raíces, no de los que están aquí de paso. Hay que tomar en cuenta de que la identidad es un proceso inacabado, pero se puede sintetizar como un sentido de pertenencia a un lugar, a un sitio, a una tierra.

Forjar un hogar común, construir una ciudad justa, es la aspiración de los habitantes de este mosaico cultural de México en el Caribe. Los cancunenses estamos en una permanente búsqueda de símbolos que nos identifiquen, de puntos comunes de referencia, de historias compartidas con todo Quintana Roo, estado del que somos parte indisoluble.

Las historias de Cancún y de Quintana Roo no son vidas paralelas sino historias entreveradas. Cancún tiene apenas 54 años de existencia. En la vida de un ser humano llegar a esta edad es alcanzar la madurez, pero en la vida de las ciudades 54 años es un tiempo muy breve. Pero en esta brevedad del tiempo transcurrido, los años vividos han sido plenos e intensos, constituyen una hazaña sin par en la historia de las ciudades.

El próximo 24 de noviembre, Quintana Roo cumplirá 122 años de su creación como Territorio Federal. Una historia de fe, de coraje y de lealtad a la tierra.

Los cancunenses buscamos afanosamente puntos de coincidencia, porque nuestro destino no es el desarraigo sino la construcción de una ciudad que sea hogar común, sombra de nuestro andar, cobijo de nuestra nostalgia.

Los cancunenses caminamos por nuestra ciudad y la sentimos, adivinamos su palpitar, y algo nos dice que aquí está la raíz espiritual que siempre habíamos buscado. Hace casi tres lustros, poco después del azote de Wilma, regresando de un viaje mi hijo de entonces cinco años se asomó a la ventanilla del avión y me preguntó: “ya vamos a llegar?” – Si, como lo sabes ?-

-Te voy a decir un secreto: yo siento a Cancún”.

Revelo ese secreto para decir que la identidad de Cancún, la identidad de los cancunenses es la que está, al final de cuentas, en la mirada, en la sonrisa de nuestros hijos. Sentir a Cancún y sentir a Quintana Roo en el alma. ¿Puede existir identidad más poderosa que ese sentimiento?

redaccionqroo@cambio22.mx

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