La Elegancia Taurina de Tizimín: Entre Maderas y Tradiciones revive un Año más

• Celebrando la Tradición Taurina durante la Feria de Reyes

• Descubre la Historia y Resiliencia de los Tablados Tizimileños

Gabriel Hernández/CAMBIO 22

El coso taurino de Tizimín, un verdadero símbolo de la ciudad, se prepara para iluminar las festividades en honor a los Tres Santos Reyes.

Este tablado artesanal, considerado una joya cultural y orgullo de Yucatán, despierta anualmente durante la Feria de Reyes para acoger los emocionantes eventos taurinos.

Conocido por su construcción en madera y el resplandor de los huanos que lo visten, el coso cuenta con 61 palcos distribuidos en tres niveles.

En la estructura resalta la resistencia de las maderas tropicales como Yaax Xuúl y Kanasín K´anchunub que la componen brindando la fortaleza que se necesita para mantener de pie a un coso taurino de tal envergadura.

La seguridad es clave en este escenario taurino, especialmente durante el Baxal Toro, evento tradicional que pone a prueba la solidez de la estructura.

La destacada responsabilidad de los amarradores y las medidas de seguridad implementadas para garantizar la protección de los miles de asistentes, han convertido a los “Tablados” un centro de espectáculos, seguro y visitado por cientos de familias cada año.

Detalles arquitectónicos como las medidas precisas de cada nivel y la disposición estratégica de los palcos revelan la cuidadosa planificación detrás de este coso taurino.

A lo largo de las décadas, ha cambiado de ubicación, desde la estación de ferrocarriles hasta su actual enclave en la calle 44, entre 47 y 45.

Historias como el ladeo en el Parque Juárez y el incendio de 2019, que conmovió a la población, destacan la resiliencia de la comunidad tizimileña. La reconstrucción rápida de los palcos afectados permitió que las corridas continuaran, demostrando la devoción y amor por esta tradición.

Este coso taurino es más que un escenario de corridas; es un testamento de la historia y la pasión taurina de Tizimín.

La elegancia taurina de esta icónica estructura, es un verdadero patrimonio cultural que sigue brillando en honor a Gaspar, Melchor y Baltasar, los patronos venerados de la ciudad.

 

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