• El impacto y el dolor de una pesadilla puede ser mucho mayor que el de un puñetazo: John Katzenbach

 

Redacción /CAMBIO22

Hay pesadillas que duran una noche y otras que duran años, cada vez más personas afectadas por diversas acciones y omisiones del “gobierno de la transformación” parecen transitar por esa muy larga pesadilla.

En nuestra anterior colaboración advertimos que el deterioro nacional podría aumentar en los últimos meses de la gestión del inquilino de Palacio Nacional y –tristemente- así es.

En esta oportunidad se comentan dos nuevos y enormes agravios que pretende aplicar el mandatario por conducto de sus leales legisladores. En los últimos poco más de cinco años el presidente ha calificado cotidianamente a grupos de ciudadanos como sus “adversarios” y así los trata. Convierte la patria en arena de batalla que ya ha lastimado a la sociedad, a la cordialidad y a la cultura de la paz.

Tal es el caso de sendas iniciativas que presentaron fieles y obedientes legisladores oficialistas en la cámara de senadores y en la de diputados respectivamente, que probablemente sean aprobadas con el “mayoriteo”, en apego a la fe ciega que les profesan a su jefe.

Estas reformas revelan que la “transformación” que impulsa la 4T consiste en múltiples asaltos para debilitar más al tejido social y aumentar la polarización. Pretenden dar otra vuelta a las tuercas de la destrucción:

I. Disminuir la protección del Amparo es el objetivo de la iniciativa presentada en el senado para restringir a los juzgadores a dictar suspensiones tanto provisionales como definitivas y que cualquier ley, a pesar de su inconstitucionalidad, violatoria de tratados internacionales o de derechos humanos, sea vigente, aunque la ley impugnada cause todos los efectos perniciosos posibles.

Esta es una muestra del revanchismo que mueve a la actual administración por las suspensiones y declaratorias de inconstitucionalidad de varias de sus leyes que ha hecho el Poder Judicial Federal.

Lo más probable es que esa iniciativa, de prosperar, sea violatoria de la fracción X del artículo 107 Constitucional y de la aplicación del Control Difuso.

ll. Luego de que el gobierno agotara los fondos que significaban ahorros de los gobiernos anteriores con la extinción de 109 fideicomisos en perjuicio de apoyos a la ciencia, la tecnología, la innovación, la cultura, el medio ambiente, el campo, el deporte y para superar desastres naturales, entre otros, se retoma la idea de disponer de los ahorros de los trabajadores.

El objetivo de la iniciativa presentada en la cámara baja es que el gobierno disponga, como si fueran recursos públicos, de los ahorros de los trabajadores de más de 70 años y con ello concretar la ambición del mandatario de disponer de todos los recursos financieros en el país.

Se han propuesto reformar las leyes del Seguro Social y del INFONAVIT para que los ahorros que no hayan sido reclamados a los 70 años de edad del titular de la cuenta correspondiente se envíen al “Fondo de Pensiones para el Bienestar”, supuestamente para garantizar una pensión igual al último salario de los trabajadores, sin tener en cuenta que para lograr esa meta se requieren, según expertos en temas de pensiones, de una cantidad del orden de los 7 billones de pesos. La suma que significará la confiscación de los ahorros para el retiro en dos millones de cuentas, oscila en los 40 mil millones de pesos, es decir el 0.57% de los recursos necesarios, cifra insignificante para el tamaño del proyecto.

Evidentemente estamos frente a una ocurrencia electoral que podría financiarse con los ahorros para el retiro o la vivienda de los trabajadores mayores de 70 años.

 

Dice el mandatario que las pensiones de quienes cumplan 70 años y no las hayan utilizado o reclamado, serán manejadas por el gobierno ya que, según él, es mejor a que las manejen las Afores o el INFONAVIT, que así se protege al ahorrador.

Ayer en la comisión de seguridad social de la cámara de diputados, los legisladores incondicionales al presidente, sin leer la iniciativa presentada, aprobaron su dictamen por mayoriteo. Llama la atención la celeridad con la que Morena en San Lázaro busca que se apruebe esta iniciativa.

Cabe tener en cuenta que las iniciativas que se comentan carecen de expresión en su plan sexenal 2018-2024, en los programas operativos derivados del mismo y de las asignaciones presupuestales.

Tanto el inquilino de Palacio Nacional como los legisladores fieles a su causa han traicionado el juramento de cumplir y hacer cumplir la Constitución y han dado la espalda al pueblo.

Es evidente que las metas que se planteó el gobierno en su Plan Nacional de Desarrollo 2018-2024 no se alcanzaron, con lo que se confirma que transformar NO es sinónimo de mejorar.

A lo largo de la gestión política y de gobierno de esta administración hemos detectado que su idea de gobernar consiste en quebrar las relaciones en nuestro tejido social y propiciar que los mexicanos nos enfrentemos unos con otros, nos hagamos daño entre todos, sin detenerse ante la siembra de emociones y sentimientos negativos como una forma maligna de concentrar poder y de provocar actos de violencia.

Tristemente, la apatía de la gran mayoría de los ciudadanos ha sido una característica de nuestro tejido social que se manifiesta en el ejercicio y defensa de sus derechos.

 

 

Fuente : El Economista

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