Redacción/CAMBIO 22

José María Morelos, 14 de noviembre. – La comunidad de La Esperanza se enfrenta a graves problemas de infraestructura y servicios básicos que afectan la vida cotidiana de sus habitantes. La falta de mantenimiento en la vía carretera y la inestabilidad de la energía eléctrica han generado descontento y preocupación entre los habitantes, quienes han externado su inquietud por las condiciones actuales.

José Manuel Noh Escamilla, exdelegado municipal de La Esperanza, destacó la necesidad de realizar acciones inmediatas para resolver estos problemas. Aunque la carretera, construida hace cuatro años durante la administración de Sofía Alcocer, aún conserva su calidad gracias a la carpeta asfáltica, la maleza ha invadido los márgenes de la vía, reduciendo su visibilidad y anchura. Esto representa un riesgo, especialmente para los motociclistas, ya que las ramas y arbustos obstruyen el camino, dificultando el paso seguro.

“Hace mucho que no se le ha dado el mantenimiento adecuado a la carretera. El año pasado se realizó el último chapeo, pero con el cambio de delegado esperamos que el presidente municipal nos apoye nuevamente para limpiar las orillas, ya que el presupuesto para esto ha sido limitado”, comentó Noh Escamilla. La comunidad ha formado un comité con autoridades locales para gestionar el apoyo del gobierno municipal y estatal en este aspecto.

En cuanto al suministro eléctrico, Noh Escamilla señaló que las interrupciones en el servicio son constantes y ocurren principalmente en las mañanas y tardes. “El viento y otros factores provocan que se vaya la luz, y la Comisión no ha dado mantenimiento a la línea desde hace años. La comunidad ya ha tenido mucha tolerancia, pero ya es momento de tomar medidas”, expresó el exdelegado. En la próxima asamblea ejidal, se discutirá la posibilidad de contactar al gerente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para exigir la revisión y reparación de la línea eléctrica, que hasta ahora ha sido desatendida.

Además de La Esperanza, otras comunidades en la misma ruta, como Rancho Viejo, Javier Rojo Gómez y San Antonio Tuk, también dependen de la carretera y el servicio eléctrico. Según el ex delegado, aproximadamente 300 campesinos participarían en labores de chapeo para mantener los caminos seguros, ya que la vía es esencial para el traslado de personas y mercancías.

 

 

 

redaccion@diariocambio22.mx

HTR

WhatsApp Telegram
Telegram