• En cuatro municipios se han detectado en la vía pública y en plazas comerciales

 

  • Se ha procedido a ubicar a los propietarios o responsables para su retiro y en caso de negativa se involucra a la Fiscalía General del Estado

 

Laura Beytia / CAMBIO 22

CHETUMAL, 10 de diciembre.- En Quintana Roo como en todo México, la venta, importación y distribución de vapeadores está prohibida y con sanciones para quienes los comercialicen y aunque se permite la posesión y consumo personal, con la aprobación de la reforma a la Ley General de Salud, se busca un control más estricto para erradicar estos dispositivos que son consumidos especialmente por menores.

Jaime Torres Viveros titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) afirmó que, aunque durante todo el año han implementado acciones para la detección y retiro de máquinas expendedoras, se siguen ubicando estos dispositivos en plena vía pública y en plazas comerciales, particularmente en cuatro municipios, por lo que han procedido con las clausuras correspondientes.

“Son un promedio de 23 máquinas expendedoras de vapeadores las que han sido clausuradas en al menos cuatro municipios de Quintana Roo, lo que ha obligado a los propietarios a retirarlas, es constante la vigilancia y por eso es que se ha logrado detectar estos equipos y retirarlos, por ejemplo, en Othón P. Blanco se localizaron varias máquinas en el boulevard Bahía, los cuales tras los procedimientos los retiraron de inmediato y también Tulum, Playa del Carmen y Benito Juárez, donde de igual manera se han identificado, pero la cuestión es que aunque se procede a su retiro, después vuelven a aparecer.”

Detalló que una vez que se han localizado estas máquinas, proceden con dar con los propietarios o responsables de dichos dispositivos, para notificarle del retiro y en caso de negativa, se da parte a la Fiscalía General del Estado, que se encarga de levantar el equipo y trasladarlo a sus instalaciones, debido a que la Cofepris, no puede almacenar, ni descargar el producto.

“Normalmente la gente entiende que está prohibido y cuando se les avisa, ellos mismos retiran la máquina y el producto, solo en casos de reincidencia o negativa, se involucra a la Fiscalía junto con el ayuntamiento para que se pueda proceder al retiro” sostuvo.

Apenas la noche de este martes, la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados aprobó reformas constitucionales que prohíben totalmente el uso de vapeadores y cigarrillos electrónicos en México, con sanciones de hasta ocho años de cárcel por su venta y reconoce al vapeo, como amenaza a la salud pública, lo que permitirá implementar políticas para disminuir la dependencia a su uso y proteger a grupos vulnerables.

La iniciativa, restringe en todo el territorio nacional la adquisición, producción, fabricación, transporte con fines comerciales, almacenamiento, importación, exportación, distribución, venta y suministro de estos dispositivos, así como todos los actos de publicidad o propaganda para su consumo, con lo que se espera, poner freno a su uso.

 

 

 

lau.beytia@diariocambio22.mx

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