La Clase Trabajadora, la Gran Olvidada en Festejos de los 50 Años de Quintana Roo

• Necesariamente Incómoda

Graciela Machuca Martínez/CAMBIO 22

El territorio que hoy ocupa el estado de Quintana Roo ha estado expuesto, desde tiempos inmemoriales, a los efectos de todo tipo de fenómenos meteorológicos que han traído múltiples desgracias, pero de las cuales, tanto la población originaria, como la inmigrante, han superado con base a esfuerzos y resilencia.

Desde hace 50 años, cuando el gobierno federal decidió crear el estado de Quintana Roo, a esos obstáculos, se añadieron problemas políticos, económicos y sociales, pero quienes decidieron formar parte de este proyecto de vida, han conjuntado energías para tener el Quintana Roo de hoy, ejemplo de desarrollo turístico a nivel internacional, a pesar de que las acciones gubernamentales no siempre se han sumado a esa tarea.

El actual estado de Quintana Roo es producto del trabajo de varias generaciones, muy a pesar de la clase política gobernante de ayer y hoy, cuyos integrantes se han caracterizado por resolver su economía personal y la de sus socios, olvidándose que la política debiera utilizarse para el bienestar colectivo. Si hacemos un recorrido por las familias que han tenido el poder político en la entidad veremos que hoy tienen un poder económico que no tenían cuando llegaron al poder.

Han pasado cinco décadas para tener destinos turísticos de talla mundial como Cancún, Playa del Carmen, Cozumel o Tulum, pero esa actividad turística de primer mundo, está sustentada por una clase trabajadora que vive en condiciones deplorables, en asentamientos humanos llamados “irregulares”, los cuales se fueron conformando debido al olvido gubernamental y de la iniciativa privada para otorgar viviendas dignas a la mano de obra que constituye el motor de la economía quintanarroense.

Cuando la actividad turística desciende en Quintana Roo por cuestiones climáticas, por razones políticas y económicas o por la inseguridad que se presenta por todos los rincones de la entidad, las primeras personas que tienen que pagar las consecuencias son las trabajadoras, quienes pierden sus empleos o tienen que trabajar menos horas o días a la semana, y, además, deben estar en espera de que se reactive la actividad para poder recuperar sus empleos, porque si no están, atentas, incluso haciendo trabajo sin sueldo, las empresas se olvidan de ellas y contratan a quien estar disponible.

Los homenajes con motivo de los 50 años del estado de Quintana Roo deben hacerse en honor de esa clase trabajadora que sin importar las condiciones climatológicas, el deficiente transporte, la lejanía de sus lugares de residencia y las precarias condiciones laborales, han sido los pilares de la economía estatal.

Ahora que se celebran las cinco décadas que el gobierno de Luis Echeverría Álvarez, le pidió al Congreso de la Unión crear el estado de Quintana Roo, nos encontramos con un complejo turístico que está llegando a su máximo desarrollo, y no porque se carezca de superficie y de otros recursos naturales para su crecimiento, sino porque las condiciones políticas y sociales del país le están cortando las alas, porque los tres niveles de gobierno han sido incapaces de brindar garantías de seguridad pública, seguridad jurídica y seguridad financiera, tanto a los capitales nacionales como extranjeros.

La situación económica para la clase trabajadora del sector turístico es crítica durante los meses de septiembre, octubre y parte de noviembre, ya que la ocupación hotelera va en picada, incluso desde la temporada de verano, cuando no se logró alcanzar las espectativas que se tenían.

En la última semana de septiembre se informó que Cancún iba perdiendo su principal mercado que es el estadounidense, pues entre junio y julio dejaron de llegar 388 mil turistas procedentes de Estados Unidos, pues estarían prefiriendo los destinos europeos. Así mismo, el mercado canadiense que ocupa el segundo lugar de los países emisores del destino dejó de recibir 400 mil viajeros durante este 2024 respecto al mismo periodo del año pasado, de acuerdo a una publicación de Reportur México.

La misma fuente recordó que respecto al mercado de USA, el director del Centro de Investigación y Competitividad de Turismo (Cicotur) de la Universidad Anáhuac, Francisco Madrid Flores, señaló que “lo vimos en la pasada temporada; no se logró la meta prevista, porque los estadounidenses están viajando a Europa casi el 37%, lo que ha significado pérdidas para el sector”.

Para el día dos de octubre se documentaron nuevas evidencias de que los cuartos de hotel, en la Riviera Maya no se han ocupado como se esperaba, debido a que ese día se alcanzó el 47 por ciento de ocupación en alrededor de 57 mil cuartos de hotel, que significó el mayor desplome de afluencia de turistas en lo que va del año
Con estas cifras del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, se establece que se trata de la mayor baja, cifra similar como las que se registraban durante la recuperación por la pandemia, a finales de 2020.

En la fecha referida, de los 57 mil 108 cuartos de hotel con los que cuenta el destino, estuvieron apenas ocupados 27 mil 29.
El organismo, reconoció que la situación ya venía reflejándose desde septiembre pasado, cuando el porcentaje de ocupación bajó hasta el 54% de afluencia, de acuerdo a declaraciones públicas.
Las causas del descenso de la afluencia turística a los destinos turísticos de Quintana Roo son diversas, desde las condiciones políticas y económicas, como en Estados Unidos, donde en noviembre próximo se realizarán las elecciones presidenciales o la oferta turística que hay en países europeos o en los cercanos del Caribe.

A estos motivos no podemos cerrar los ojos y olvidarnos de las razones políticas como pudo ser el cambio a nivel del gobierno federal y desde luego que tiene gran incidencia en la toma de decisiones para viajar o no a Quintana Roo, la alarmante inseguridad que se observa en todos los destinos. Todas y cada una de las evidencias las tenemos a la vuelta de la esquina. Quienes no ven esa realidad son los grupos políticos y económicos que por el momento están a cargo de los gobiernos municipales.

Fuente: Infobae

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