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• El creador mexicano reinventa su obra combinando el pincel clásico con herramientas virtuales

 

• Su propuesta artística rompe barreras y conecta el pasado con el futuro del arte

 

Redacción / CAMBIO 22

El movimiento del mantel de una mesa producido por el viento, puede mantenerse estático por siempre, al igual que un velo que vuela con el aire. Las imágenes que producen las cosas más simples que rodean el entorno del artista Isaac Katz, se archivan en su memoria para después procesarlas a la realidad, “todo dentro de un contexto de abstracción digital y funcionalidad tangible”, dice.

Katz presenta una propuesta que redefine el concepto de arte-objeto. Su nueva colección, exhibida de forma permanente en Palmas 520, a partir del 28 de agosto, combina procesos digitales, impresión 3D y acabados artesanales para dar vida a piezas únicas que dialogan con la estética, la naturaleza y la tranquilidad de los espacios.

“Es diseño coleccionable”, explica. “No son muebles en el sentido tradicional, sino piezas funcionales que conservan el alma del arte. Pueden ser mesas, sillas o esculturas de pared, pero siempre con un concepto estético que te invita a detenerte y observar”, dice Katz en entrevista para El Sol de México.

Su obra, que antes se centraba en composiciones abstractas sobre lienzo o papel, ahora se materializa en objetos tridimensionales creados a partir de formas digitales. Desde velos sólidos que flotan en el aire hasta geometrías erosionadas con precisión milimétrica, cada pieza nace de un mismo origen: recrear procesos naturales para luego trasladarlos al mundo físico.

“El proceso comienza frente a la computadora y avanza con tecnología de impresión 3D o CNC, para luego pasar a un trabajo minucioso a mano. Resinas, concreto y acabados automotivos, dan el toque final a obras que, más que decorativas, buscan transmitir paz y bienestar al entorno del usuario”.

Isaac, nacido y criado en México, vive actualmente en Los Cabos, donde produce sus piezas. “El paisaje desértico y las playas son un estímulo constante. “Es un entorno privilegiado para crear”, afirma. Su formación en animación y arte digital en la University of Southern California (USC) le dio las herramientas técnicas que ahora aplica a su particular lenguaje estético.

El creativo, habla de un “perceptivismo” que surge de su capacidad de asombro hacia los detalles que nos rodean y que para la mayoría pasarían desapercibidos.

“Es un término que se me ocurrió implantar como concepto de mi obra hace bastante tiempo; en aquel entonces, estaba manejando otro tipo de obra. Entonces, es parte de lo mismo, pero este es un concepto nuevo, diferente a lo que hacía antes”. En su mayoría no son cuadros.

“En este momento el enfoque cambió y me estoy dedicando más al tema de diseño como tal. Piezas funcionales, llámese mesas de diferente tipo, algunas sillas, además de comedores y mesas laterales”.

Y enfatiza en que no se trata de un concepto de mueble como tal, “es un concepto, dentro de lo que conocemos como diseño coleccionable, son piezas únicas, pero que finalmente siguen siendo piezas funcionales”.

En esta nueva colección, el arte plástico no deja de integrarse como parte de su expresión y se aprecia en piezas de pared como esculturas y paneles tridimensionales.

Katz apuesta por el arte funcional como refugio frente al caos digital

En una época donde la sociedad vive bajo la inmediatez digital, Isaac coincide con la idea de ofrecer experiencias que permitan conectar a las personas con su espacio y disfrutar de la tranquilidad de su entorno para olvidarse del caos externo.

“El arte en general tiene ese efecto y esa parte inusual de que es un objeto que puede ser funcional, estético o decorativo, y en realidad, en ocasiones lo compras más por su belleza que por su funcionalidad y esto te hace consentirte y generar armonía para sentirte bien todos los días”.

Sobre el papel de la Inteligencia Artificial en el arte, el creador es claro: “Es una herramienta más. Lo que importa es el ojo del artista, su visión. La IA no quita originalidad, abre posibilidades”.

Isaac katz fusiona escultura, tecnología y funcionalidad

En cuanto la imagen se archiva en la mente de Isaac, pasa a un molde con resina, “pero la creación del objeto original, digamos, viene del mismo universo”. En vez de tomarle una foto lo recreó a través de mi pensamiento.

“El objeto empieza en la computadora, es el diseño en forma digital y de ahí se tiene que trasladar de alguna forma al mundo físico. Empleo varias tecnologías para lograrlo, una de ellas es la impresión 3D, que es primordialmente la que uso”. También usó CNC y dentro de la impresión 3D, que es como un término muy general, hay varias tecnologías distintas.

“De ahí se imprime el objeto y empieza la obra en físico, que es muchísimo trabajo y muchísimas horas de trabajarlo a mano, pero no es la pieza final, sino de ahí se sacan moldes y se hacen diferentes materiales y es algo que estoy explorando mucho ahorita, usar diferentes materiales como resina, concreto, diferentes acabados, como el automotriz, unos acabados que diseñamos nosotros en nuestro taller, donde puedo jugar con los colores, con la luz, con cómo se ve la pieza bajo diferentes circunstancias y eso es algo muy interesante que no podía hacer antes”.

“La creación del objeto original, digamos, viene del mismo universo. En vez de tomarle una foto, lo recreo a través de mi pensamiento”

Sobre la Inteligencia Artificial, opina: “Ahora me está ayudando mucho en temas de crear ciertas imágenes que necesito para enseñar mi obra o en arreglar fotografías, o sea, no tanto en la creación en sí de la pieza, pero seguro va a llegar un momento donde ya pueda utilizarla para ese efecto también”.

Y le cuestionamos si esto no afectaría su autenticidad como artista. A lo que responde: “Creo que lo importante es que se pueda aplicar a todo. No nada más en la cuestión artística, sino en muchas otras ramas, pero definitivamente en la artística lo que es más valioso es el ojo del creador”.

Katz es el fundador y director creativo de Katz Studio, una firma que ha irrumpido con fuerza en el panorama internacional del arte y el diseño contemporáneo gracias a una visión singular: fusionar escultura, tecnología y objeto funcional en piezas que desbordan el lenguaje tradicional del mobiliario. Con una formación en Animación y Artes Digitales por la School of Cinematic Arts de la University of Southern California, Katz traduce principios de movimiento, narrativa y composición visual en formas tridimensionales de fuerte presencia espacial y carga poética.

Su obra ha sido expuesta en plataformas internacionales de alto perfil como Design Miami, Zona Maco, Kips Bay Showhouse, Design Shanghai y la Palm Beach Modern and Contemporary Fair, generando un diálogo cada vez más sólido con coleccionistas, arquitectos y curadores de todo el mundo.

Fue representado durante tres años por la reconocida Todd Merrill Studio en Nueva York, y más recientemente ha consolidado su independencia creativa con la apertura de showrooms propios en Ciudad de México y Los Cabos, puntos clave para atender una clientela global en expansión.

 

 

 

Fuente: El Sol de México

redaccion@diariocambio22.mx

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