Invadida de Corrupción y Protección a Organizaciones Criminales las Corporaciones de Seguridad en el Sur de Quintana Roo

• Agentes Asignados a la Ciudad de Chetumal Recibían desde 500 hasta 100 Mil Pesos a la Semana, con la Finalidad de Dejar Libre el Paso a Operaciones de Venta de Drogas y la Recepción de Cargamentos en el Municipio Capitalino.

Redacción/ CAMBIO 22

La violencia que sacude al centro y sur de Quintana Roo se puede explicar por la alta corrupción que existe entre los altos mando de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y su relación con el crimen organizado.

Información de autoridades federales revelaron que, el motivo del ataque al agente de la Policía Municipal en días pasados y la ejecución de un empresario y ex policía ministerial en pleno boulevard Bahía, de la capital de Quintana Roo, demuestra el alto grado de penetración y complicidad que impera en los cuerpos policiacos de esa zona de la entidad.

Investigaciones federales revelan que más de 200 agentes policiacos tanto de la estatal como de la municipal se encuentran en la nómina del crimen organizado en la ciudad capital, en específico para el cártel de Caborca.

La ciudadanía Capitalina ha reafirmado en repetidas ocasiones su desconfianza hacia las instituciones, cuya labor obedece a los designios de la organización propiedad de la familia Caro Quintero y que nada ocurre ahí sin la autorización de esa poderosa red de narcotraficantes que han llegado al descaro de amenazar con masacrar familias enteras de los policías que intenten retirarse de la estructura de protección.

En esta lista, al parecer se incluyen y sobresalen los nombre del Comisionado de la Policía Estatal, Carlos Lázaro Caraveo Vázquez y Joaquín Morales Fernández director Operativo de la Policía Estatal y oficiales de la policía turística, rural, preventiva y de caminos del municipio de Othón P. Blanco.

Lo más sobresaliente de lo ocurrido, es que, Joaquín Morales, se autoasignó al cuidado de candidatos en estas elecciones, llevándose consigo a 20 uniformados de la policía estatal.

La información proporcionada por agencias de investigación del orden federal señala que, la lista permanecía en poder de Carlos Lázaro Caraveo Vázquez y Joaquín Morales Fernández, misma que se han negado a compartir, siendo que es por los agentes de tropa, que se llegó a saber de algunos nombre y datos de mencionado listado.

Es necesario recordar que, la lista mencionada fue asegurada a integrantes del crimen organizado por las autoridades en enero, luego de que, un hombre conocido como “El Grúas”, escapara de la policía a mediados del mes de enero, a bordo de un vehículo blanco causando una persecución a alta velocidad en terracería de la colonia El Edén. Al dejar abandonada la unidad, también dejó el listado.

Debido a esto, “El Grúas” simuló su ejecución y suplantó su personalidad con un cuerpo cercenado y abandonado en el camino de terracería conocido como “La Viuda”, cerca de la comunidad de Luis Echeverría.

Tras este incidente y al cambio de adscripción y de servicios a varios elementos que se incluían en la red de complicidades al cartel de Caborca, inició la limpia de los integrantes de esa lista, misma que presuntamente seguiría en poder de los mandos de la policía mencionados y no han accedido a compartirla con las otras fuerzas de seguridad por temor a recibir las consecuencias legales.

La alerta por el posible inicio de una “limpia”, esto es la ejecución de agentes de la policía en esa lista fue dada esta mañana de manera extraoficial entre los elementos.

Los uniformados ahora temen por su vida, pero hasta el momento no se ha dado ninguna reacción pública por parte de las corporaciones.

Y es que entre los propios efectivos se comenta que el policía municipal Ángel L. con clave “Borrego” y que sufriera un intento de ejecución que causó la muerte de su hijo menor de edad, confirma la limpia que ha iniciado el cártel de Caborca en contra de los efectivos policiacos que han pretendido salirse de su estructura de protección.

El Borrego según las primeras investigaciones había roto acuerdos con el cártel de Caborca y antes de su atentado lo habían citado los altos jefes criminales, para reuniones y a ninguna asistió.

Se sabe que al policía quintanarroenses lo citaron para una reunión donde se hablarían temas de los nuevos acuerdos que tendrían con la policía municipal.

El policía Ángel con clave Borrego y el Alto Jefe policiaco Joaquín Morales son policías activos en la capital de Quintana Roo, estos dos personajes son los que formaban parte del anillo de comunicación y enlace con el Cártel de Caborca para cometer los levantones y ejecuciones en la capital del estado.

Es por ello que después de cada ejecución nunca había detenidos ya que era una orden directa de los altos mandos de no perseguir a ninguno de los sicarios del cartel de Caborca.

Además los integrantes de la organización Caro Quintero, utilizaban calcamonías en sus vehículos como identificación para que la Policía municipal y estatal no los detuviera en la capital del estado y otros puntos del municipio.

Después del atentado en su contra y en dónde perdió la vida su menor hijo se suscitó una intensa movilización por parte de los cuerpos de seguridad de los tres niveles de gobierno y se detuvieron a tres personas dos hombres y una mujer con un bebé, armamento y chalecos tácticos como también uniformes de la policía estatal.

Estos criminales no respetan códigos y hacen lo que se les antoja con la ciudadanía y a los chetumaleños ya que igual se sabe que está muy metido en las campañas políticas del partido dominante en toda la zona sur de Quintana Roo.

Se sabe que han levantando a coordinadores de campaña donde son amenazados para decirle a sus líderes que abandonen la contienda y le dejen el camino libre al partido que les favorecerá en sus actividades criminales, se plasma en el informe aunque esta última versión no ha sido confirmada.

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