• En Chetumal, la asistencia de los votantes en las primeras horas de la jornada para elegir ministros, magistrados y jueces federales y estatales es muy baja

 

 

  • La capital de Quintana Roo no será terreno fácil para el operativo electoral de la 4T en busca del 30 % de participación electoral, pues están frescos el rechazo al gobierno municipal en la elección de hace un año y el rechazo magisterial a la elección

 

 

 

Ricardo Jesús Rivas/Francisco Hernández/CAMBIO 22

CHETUMAL, 1 de junio. – La jornada electoral para elegir a jueces y magistrados del Poder Judicial arrancó con una participación ciudadana marcadamente baja en sus primeras horas.

En la capital de Quintana Roo, tradicionalmente muy participativa, más en los inicios de jornada, la respuesta de los votantes ha sido muy escasa, como confirmaron funcionarios de casilla que, cerca de las 10:00 de la mañana, a dos horas de la apertura del acceso a las urnas, reportaban la asistencia de apenas 10 personas como máximo.

En la casilla 0332, ubicada en el jardín de niños 8 de Octubre, se observó un reducido grupo de ciudadanos que acudió a temprana hora a emitir su voto.

Sin embargo, en otras casillas como la 0343 en la primaria Rufo Figueroa, la 0344 en la primaria Ignacio Herrera, la 0345 en la primaria Santiago Pacheco Cruz y la 0355 ubicada en un domicilio particular sobre la calle Justo Sierra, el panorama fue similar: prácticamente vacías y funcionarios a la espera de votantes.

La apatía electoral podría estar vinculada a diversos factores, entre ellos el desconocimiento sobre el nuevo formato de elección, la falta de difusión de los candidatos y el desinterés generalizado en temas relacionados con el Poder Judicial, muy a pesar de la promoción que los gobiernos y los legisladores dieron al proceso con una autorización amañanada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

Este fenómeno pone en entredicho el alcance de las estrategias de participación implementadas por las autoridades y abre la discusión sobre la legitimidad y representatividad que tendrán los resultados de esta inédita elección.

Pero también anticipa un posible riesgo del fracaso del operativo electoral implementado, hasta con acordeones comestibles y mil pesos de por medio, por la 4T, principalmente Morena y el PVEM, para llevar a votar al 30 % de la lista nominal de electores en Quintana Roo, sobre todo en la capital del estado, donde en el 2024 perdieron la elección municipal ante Movimiento Ciudadano, por el rechazo que genera el gobierno de la alcaldesa Yensunni Martínez Hernández, y sólo rescataron la comuna gracias a voto de la ribera del Río Hondo.

Además, está vigente el rechazo a la jornada electoral hecho por llamado del magisterio quintanarroense, que tuvo uno de sus núcleos de protesta principal en Chetumal, como parte de su presión y represalia en el tema de la Ley del ISSSTE.

Frente a una participación tan limitada, será crucial que los organismos electorales y los poderes públicos de la federación y el estado realicen un ejercicio de análisis crítico y autocrítico, respectivamente, para comprender las causas de este bajo involucramiento ciudadano, que no muestra el supuesto apoyo masivo al Plan C de Andrés Manuel López Obrador y Morena, adoptado y aplicado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

 

 

redaccion@diariocambio22.mx

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