Industria Hotelera y Restaurantera Enfrenta la Temporada Alta con Déficit de Personal

Olivia Vázquez/CAMBIO 22

CANCUN, Q. ROO, 14 de abril.- La industria hotelera y restaurantera enfrenta la temporada más alta post-covid con un déficit en su plantilla laboral que obliga a los trabajadores a doblar turno, a trabajar jornadas de hasta 12 horas sin descanso y a una acelerada capacitación para atender la demanda en la calidad del servicio. La movilidad laboral se ha incrementado y el trabajador busca en este proceso una mejor condición laboral que atienda realmente sus necesidades económicas.

El déficit se viene enfrentando desde el periodo de reactivación que se dio en invierno pasado cuando la apertura de la mayoría de los servicios turísticos aceleró su reactivación con la mejora en el color del semáforo epidemiológico.

A decir de Jesús Almaguer, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres (AHCPM&IM), muchos hoteles lograron completar sus nóminas para este periodo vacacional, sin embargo algunas cadenas siguen enfrentando esta condición por las aperturas de nuevos hoteles y la reactivación que se ha dado.

El tema central, refiere por su parte, Marcy Bezaleel, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (Canirac), es que muchos de los trabajadores calificados que salieron con la pandemia de covid-19, no retornaron a sus centros laborales, se quedaron en sus lugares de origen o han encontrado otra oferta de trabajo, lo que obliga a una capacitación intensa en puestos claves para la operatividad de los negocios.

Muchas cadenas hoteleras y restauranteras iniciaron desde noviembre del año anterior y hasta la fecha, diversas caravanas del empleo, así como signaron alianzas con el Servicio Nacional de Empleo para cubrir estas vacantes con personal de otros estados del país, a fin de cubrir los perfiles requeridos para la función laboral, sin embargo la movilidad del trabajador se sigue dando y esta la dicta finalmente la oferta salarial, misma que se sabe en el caso de estas dos industrias, se mantiene por debajo de las necesidades económicas.

Y es que aunque se dice que en Quintana Roo nadie gana el salario mínimo vigente (172.87 pesos diarios), sino la media salariar se promedia en 358 pesos, los 10 mil pesos a los 14 mil pesos en salario que se ofrece, apenas y cubre las necesidades del trabajador por una jornada de 12 horas diarias, lo que obliga al empleado a trabajar dobles turnos para aspirar al ingreso de propina, que se convierte en 60% la parte principal de sus ingresos en la mayoría de los casos.

Esta condición, provoca una movilidad mayor de los trabajadores que buscan en estos centros de hospedaje y negocios gastronómicos la mejor opción en cuanto a propinas, sea vía directa o por reparto que se realiza en muchas empresas.

Trabajadores del destino consideran que mientras el salario directo de la empresa no se mejore, la movilidad y la falta de personal seguirá siendo una constante en el destino en este proceso de reactivación, pues muchos de estos trabajadores también confirmaron que realizando un trabajo por fuera, en la informalidad, o realizando un proyecto propio, tienen más ingresos sin tantas horas de trabajo.

o.vazquez@diariocambio22.mx

RAM