Incremento de Jóvenes Afectados por el Abuso de Alcohol en Cancún: una Realidad Alarmante

• Al menos el 50% de los adolescentes en edad de secundaria ya han experimentado el consumo de alcohol, a menudo como la primera parada en un camino que puede llevar a otras adicciones.

Redacción/CAMBIO 22

CANCÚN, Q. Roo, 11 de noviembre.- La problemática del alcoholismo entre los jóvenes de Cancún está alcanzando niveles preocupantes, en un contexto en el que la facilidad de acceso y la normalización del consumo se imponen, especialmente en una ciudad cuya economía gira en torno al turismo.

Según datos proporcionados por Jaime, Coordinador del Grupo Quintana Roo 2 de Alcohólicos Anónimos, al menos el 50% de los adolescentes en edad de secundaria ya han experimentado el consumo de alcohol, a menudo como la primera parada en un camino que puede llevar a otras adicciones.

Durante el 4° Simposio Nacional de Información a Profesionales, Jaime alertó sobre el incremento de menores de edad que, a pesar de las regulaciones, encuentran maneras de consumir alcohol.

Además, explicó cómo el abuso de sustancias es una realidad que crece con los años y que, al alcanzar la mayoría de edad, muchos jóvenes se encuentran en una situación complicada de adicción.

“La influencia del entorno y el fácil acceso al alcohol llevan a una dependencia difícil de erradicar, afectando no solo su vida personal, sino también su desempeño laboral y académico”, señaló.

El turismo, un factor clave en Cancún, ofrece una gran cantidad de empleos para jóvenes, quienes muchas veces se ven inmersos en ambientes donde el consumo de alcohol es común y aceptado.

Sin embargo, esta exposición constante se convierte en un riesgo. Según Jaime, “muchos de los jóvenes que acuden a las sesiones de Alcohólicos Anónimos lo hacen tras haber perdido la confianza de sus empleadores, quienes a menudo se ven obligados a tomar medidas extremas como el despido debido al abuso de alcohol en el trabajo”.

Cada mes, aproximadamente 100 trabajadores del sector turístico asisten a las pláticas de AA, pero menos del 50% logra mantenerse en el programa a largo plazo.

Esto evidencia el reto de sostener el interés y el compromiso de quienes luchan por salir de esta adicción, especialmente en un contexto social en el que el consumo de alcohol es parte de la vida diaria.

Además de los jóvenes, Jaime destacó la importancia de apoyar a los familiares de personas con problemas de alcoholismo.

Existen grupos especializados de ayuda para esposas, madres y otros familiares que, aunque no son los afectados directos, enfrentan las secuelas emocionales y económicas de la adicción en sus hogares.

“La aceptación del problema es el primer paso, pero muchas veces son los familiares quienes primero reconocen la situación y buscan ayuda”, explicó.

El aumento de jóvenes víctimas del alcoholismo en Cancún no solo refleja un problema de salud pública, sino también un desafío social y cultural que urge ser atendido desde una perspectiva integral, involucrando a familias, instituciones y empresas.

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