Impulsan la Reproducción Asistida para Mejorar la Genética del Ganado de Carne en la Mixteca Poblana

• Productores y especialistas aplican técnicas de inseminación y transferencia embrionaria para elevar la calidad, productividad y competitividad del sector ganadero en Puebla

Redacción / CAMBIO 22

Materiales y Métodos. Este protocolo consistió en la aplicación de Prostaglandina sintética PGF2α en dosis de 2 ml con un intervalo con un intervalo de 11 días entre la primera y segunda aplicación, 72 horas después se procedió a realizar la inseminación artificial a tiempo fijo IATF, aplicando 2ml de Hormona liberadora de Gonadotropinas GNRH al momento de la Inseminación. Sé utilizaron 56 vacas de las razas Suizo Europeo, Charoláis, Simental, Beefmaster y Brahmán Pertenecientes a 6 ranchos de productores pertenecientes a la Asociación Ganadera Local de Chiautla de Tapia Puebla en la Mixteca Poblana. Inseminadas con semen de toro importado del programa de mejora genética de la Asociación Nacional de Criadores de Raza Rubia Gallega Española.

Resultados. Las tasas de preñeces obtenidas a los 60 días de haber realizado la IATF fueron en promedio de 65% resultando similares entre las diferentes ganaderías.

Conclusiones.  Generalizar el uso de técnicas de reproducción asistida en la ganadería de carne en la mixteca poblana nos permite el uso de vacas cruzadas Europeo x Cebú lo cual repercutiría en favorecer la componente reproductiva y por ende la mejora genética. Se recomienda, bajo las condiciones de los sistemas extensivos en trópico seco, mejorar la condición corporal de las vacas al empadre para incrementar el porcentaje de pariciones antes que otro tratamiento ambiental o genético.

Palabras Clave. Inseminación, Empadre, pariciones.

Introducción.

En los últimos años se ha presentado un crecimiento exponencial de la población mundial, siendo México un ejemplo claro de esta situación considerando que en las últimos dos décadas la población nacional se incrementó de 80 millones de habitantes en 1990 a 112 millones en el 2015 (INEGI, 2015).

Por otra parte, en estudios realizados por Orantes-Zebada, et al (2014) y Román-Ponce, et al (2013) afirman que la actividad ganadera en el trópico mexicano y en la mayor parte de Latinoamérica se basa principalmente en sistemas de doble propósito (DP).

Estos sistemas se caracterizan por una intensificación tecnológica baja, utilización de ganado criollo, cebú y sus cruzas con ganado especializado en la producción de leche y cuya fuente de alimentación es principalmente el pastoreo (Gonzales-Rebeles et al, 2015).

A pesar de la importancia económica del ganado bovino del cual se obtiene la carne en pastoreo en México. El comportamiento de bovinos en pastoreo también es limitado, con bajos pesos en vaquillas de tres años de edad de (250 a 290 kg), edades de concepción elevados (35-40 meses) a primera gestación y un bajo porcentaje de becerros destetados (45-50%), largos intervalos entre partos (dos años), elevado número de abortos (19%) y mortalidad de terneros (7%)  (Mendoza y Ricalde, 1996). Es importante considerar que en las áreas tropicales de México la producción de los sistema Doble Propósito se basa en la alimentación exclusivamente con pastos donde la producción de forraje se encuentra estrechamente vinculada al manejo y a las condiciones climáticas dominantes en la zona (Palma, 2014). Este efecto del clima se manifiesta en una reducción en la cantidad y calidad del forraje, principalmente durante la estación seca. Como consecuencia los animales reducen el consumo de nutrimentos, lo que influye directamente en la tasa de productividad y reproductividad del rebaño e inexorablemente en la ganadería económica del ganadero (Vite-Cristóbal et al, 2007).

El ganadero debe mejorar las condiciones de manejo productivo y reproductivo, igualmente debe elegir los mejores sistemas de cruzamiento genético que propicié la obtención de genotipos adaptados a las condiciones climáticas, y que igualmente sean portadores de características de resistencia a enfermedades, a ectoparásitos y endoparásitos. En relación al genotipo, se ha observado que el cruzamiento más común en el trópico se basa en razas de origen Cebuinas con razas europeas para la producción de leche y carne (Hernández et al, 2000), así mismo, el uso de animales F1 ha permitido obtener resultados exitosos en la mayoría de los sistemas DP mexicanos, debido a las características de precocidad sexual, intervalos entre partos más cortos y mayor producción de leche observadas en estos animales (Becerril et al., 1981).

Los novillos de cruzas de Belgian Blue x Holstein Fresian ganan 1.05 kg/día al destete, comparados con la cruza de Simmental  x  Holstein Friesian que solo tienen una ganancia de 0.99 kg/cabeza/día (Davies y Buss, 2003). Estos autores nos indican que los novillos de raza Charolais, sin la cruza con Belgian Blue producen el mejor rendimiento de carne vendible. La canal de novillos provenientes de cruzas con Simmental posee la mayor proporción de hueso y los productores están conscientes de que es más difícil producir la calidad de ganado que el mercado demanda cuando las vacas lactantes tienen genes de Holstein. Pero el uso de buena calidad maternal y de progenitores terminales puede diluir el impacto.

Según Ozlutuk et al (2006) las razas Charolais y Simmental presentan mejores parámetros pre destete por lo que se pueden considerar para los programas de mejoramiento genético.

Para disminuir el número de partos distócicos. Lawrence (2004) sugirió algunas razas  de toros por la facilidad de partos para ser utilizados en cinjunto en una inseminación artificia, en donde el semen de Belgian Blue, Limousin y Charolais producen partos de calidad, contando Belgian Blue, Limousin y Aberdeen Angus, partos fáciles y el Belgian Blue, Limousin y Simmental partos tempranos.

Los esfuerzos de mejoramiento genético deben ser de programas integrales y coordinados de mejoramiento de la ganadería bovina. Y la adaptación de los animales a un ambiente es esencial para una producción económica hasta donde sea posible, es muy importante el cruzamiento para producir animales con resistencia a las condiciones tropicales y niveles de producción intermedios,

Desde hace 500 años el ganado criollo ha pasado por un proceso de adaptación durante muchas generaciones sobreviviendo a condiciones ambientales extremas, altas temperaturas, periodos largos de sequía e inundaciones, sobrevivir a depredadores, creando resistencia a enfermedades logrando sobrevivir  y producir  con una alimentación basada en pastos de bajo valor nutritivo. (Delgado, et al, 2001).

A final del siglo diecinueve pero en mayor grado en el siglo veinte, el ganado Cebú fue introducido en América Latina para mejorar la producción de leche y carne de los animales Criollos y también la fuerza de tracción. De esta manera se obtuvieron resultados, especialmente en la generación F1. Pero el mejoramiento atribuido al Cebú se debió a la heterosis. Esta ventaja se perdió, como ocurre tan frecuentemente, cuando el cruzamiento con el Cebú se continuó y produjo una absorción de las razas nativas.

Cruz (2006) indicó que la primera medida más sensata para mejorar estos indicadores y alcanzar mayor eficiencia es elevar el nivel cultural y técnico de los ganaderos hasta niveles que permitan generar y consolidar en ellos una cultura ganadera con criterios y principios sostenibles; y conocer, fundamentalmente, los aspectos ecológico, económico y social en los que se desarrolla su negocio.

Materiales y Métodos. 

El estudio se realizó en la región mixteca poblana  específicamente en el municipio de Chiautla de Tapia que tiene un clima predominantemente cálido semiseco y en la zona más desfavorable se presenta un clima muy cálido, donde la vegetación es menos densa, con presencia de plantas xerofita (Guizar et al, 2010). Se utilizaron 56 vacas de la raza Suizo Europeo, Charoláis, Simental, Beefmaster y Brahman pertenecientes a 6 ranchos pertenecientes a la Asociación Ganadera local  de  Chiautla de Tapia,  inseminadas  con semen de toro importado del  programa de mejora genética de la Asociación Nacional de Criadores de la raza Rubia Gallega Española. A partir del mes de agosto del 2023 se llevaron a cabo los protocolos para la sincronización del estro y ovulación con la finalidad de realizar la Inseminación Artificial a Tiempo Fijo (IATF).

La sincronización de estro se hizo con la aplicación de la hormona prostaglandina F2 alfa en dosis de 25 mg por vaca con un intervalo de 11 días entre la primera y segunda aplicación, 72 horas después se procedió a inseminar a cada vaca y al momento de la inseminación se aplicó 100 mg de Hormona liberadora de Gonadotropina (GNRH).

Resultados y Discusión.

La preñez fue diagnosticada mediante palpación rectal a los 60 días posteriores a la IATF. La proporción de hembras preñadas entre los 6 ranchos utilizados se determinó mediante una prueba de Chi cuadrada (SAS, 2001).

La taza de preñes obtenida en este estudio resulto similar entre las diferentes ganaderías con un porcentaje de 72 % (P >0.05).

Los resultados obtenidos coinciden con los reportados por Bridges et al, (2008), que en promedio la taza de preñes alcanzada fue de 68% en estudios realizados en 233 hatos.

Así también resultados similares fueron reportados por Aceves et al, (2005), quien en un programa de sincronización e inseminación a tiempo fijo determino tasa de preñes similar a lo reportado en el presente estudio.

Conclusiones.

El uso de técnicas de reproducción asistida nos permite el uso de vacas cruzadas Europeo x Cebú lo cual repercutiría en favorecer la componente reproductiva e incrementar el porcentaje de preñeces y pariciones y por ende la mejora genética.

Fuente: Ganaderia

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