Greenpeace México Exige Detener la Explotación Irregular de Material Pétreo en la Península de Yucatán

Alejandro López / CAMBIO 22

Cancún, Quintana Roo, 7 de julio del 2025.- Integrantes de Greenpeace México se manifestaron la mañana de este lunes de manera pacífica frente a las oficinas de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en Cancún.

Lo anterior, con la finalidad de denunciar la extracción irregular de material pétreo en la Península de Yucatán, especialmente en zonas de la selva maya.

Carlos Samayoa, coordinador de campañas de Greenpeace, informó que entre febrero y junio de 2025 se autorizaron aproximadamente 30 nuevos permisos para la apertura de bancos de roca.

De los cuales 26 juzgó que corresponden a proyectos operados por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), vinculados al Tren Maya.

Según Samayoa, esta situación refleja la expansión del llamado “modelo Cálica” -el patrón de extracción intensiva de piedra caliza sin evaluar adecuadamente los impactos ambientales-, que ya ha devastado casi 10 mil hectáreas de selva en otras zonas de la península.

“Esta depredación se está exportando a otras partes de la Península; Cálica es una cosita de tamaño en comparación con lo que está ese mismo modelo replicado por toda la Península, esto viene desde hace más de dos sexenios atrás, pero se ha acelerado con la llegada del Tren Maya”, explicó.

Este modelo, explicó, provoca deforestación masiva, fragmentación de hábitats y alteraciones graves al sistema de acuíferos subterráneos.

Además, el activista criticó que muchas de estas autorizaciones se otorguen de manera tardía, es decir, una vez que las operaciones ya han comenzado.

Refirió que la penetración de maquinaria en estas zonas puede ocurrir en cualquier momento, incluso antes de que se instalen mecanismos efectivos de evaluación o consulta pública.

Durante la protesta, los activistas desplegaron pancartas que leían “#queremosJaguares” y bloquearon simbólicamente la entrada de las oficinas semarnatenses, dejando un volquete cargado de piedra frente al edificio.

El activista apuntó que la selva maya —la mayor reserva de agua subterránea del país— sigue en riesgo mientras no se establezcan candados legales sólidos.

En respuesta, Greenpeace México exigió a Semarnat revisar con urgencia los permisos expedidos y suspender de inmediato todas las actividades en marcha sin la debida autorización legal.

Además, solicitó la instalación de una mesa de diálogo multisectorial (incluyendo autoridades, expertos, comunidades y sociedad civil) para garantizar la protección real de la selva maya y evitar nuevos impactos ambientales

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