Greenpeace Alerta sobre la Construcción Ilegal de una Granja Porcícola en Valle de Guadalupe, Jalisco

** La construcción y operación de dicha granja traerá afectaciones medioambientales y daños irreversibles a la zona

**La SEMADET ha hecho caso omiso a las solicitudes de reunión de las organizaciones con su titular, Sergio Humberto Graf, en dos ocasiones

Redacción/CAMBIO 22

Ciudad de México, 30 de junio.- Greenpeace México alerta sobre la construcción de una granja porcícola denominada “Granja Porcícola el Gavilán”, en el Municipio de Valle de Guadalupe en el estado de Jalisco, la cual se construirá en un predio previamente deforestado y el cual tiene sobre sí una sanción por parte de Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) debido a que existieron diversas irregularidades en su manejo como cambio de uso de suelo de terrenos forestales sin el permiso correspondiente; la remoción de vegetación forestal en aproximadamente 68 hectáreas sin contar con autorización; así como realizar el aprovechamiento forestal sin contar con la autorización para el aprovechamiento de recursos forestales maderables que debió ser previamente emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Este caso fue denunciado y atendido en 2016 por la PROFEPA, la cual determinó que el terreno debía ser restaurado.

Greenpeace y otras organizaciones internacionales han mostrado su preocupación por la construcción de granjas porcícolas en toda la región, debido a las afectaciones medioambientales y los daños irreversibles que éstas causan, entre las que destacan:

La deforestación que ya se ha llevado a cabo, y tiene como consecuencia fragmentación y pérdida de hábitat de especies de flora y fauna,
Contaminación del acuífero y el suelo con aguas residuales,
Emisiones de gases de efecto invernadero que empeoran el cambio climático,
Violaciones a los derechos humanos (contenidos en la Constitución) a un medio ambiente sano, a la salud, a la información, la participación pública y a la libre determinación de los pueblos, entre otros.

Greenpeace México ha logrado reunirse con el presidente municipal de Valle de Guadalupe, Raúl Rentería Torres, quien ha declarado que no se iniciarán obras, sin embargo, dar el permiso de construcción de la granja es parte de las responsabilidades de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial de Jalisco (SEMADET). Por ello, las organizaciones han buscado tener diálogo con su titular, Sergio Humberlo Graf Montero, sin que hasta la fecha se haya obtenido respuesta de parte de la Secretaría. Como consecuencia de ello, Greenpeace hace pública la solicitud de audiencia, haciendo uso del derecho de petición mandatado en el Artículo 8 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

“Hemos revisado la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) de la Granja el Gavilán y lo que hemos encontrado es sumamente preocupante como que el suelo en el que se pretende construir es relevante por su cobertura vegetal, ya que brinda servicios ambientales como generación de agua. También existe el riesgo de contaminación del suelo y cuerpos de agua por exceso de nutrientes, ya que no se pueden metabolizar debido a que se estarán desechando grandes cantidades de cerdaza al día (casi 2 toneladas al día).

Además, se menciona que las excretas se utilizará como alimento para el ganado, no obstante, si las excretas no son procesadas adecuadamente pueden presentar cierta toxicidad y riesgo potencial para la salud animal y humana. No sólo eso, en la misma MIA no detallan el procedimiento de limpieza de la granja y los cerdos ni el tratamiento de los desechos resultantes de esta actividad. Por ejemplo, mencionan un pozo de agua propio, sin embargo, no se anexa información de dicho pozo. Por ello, lo que sabemos es que la información presentada se encuentra incompleta”, concluyó Viridiana Lázaro, campañista de Greenpeace México.

Es por ello que Greenpeace solicita la intervención urgente de la SEMADET —que fue el organismo que otorgó una autorización condicionada— para la protección del medio ambiente, invocando el principio precautorio para resguardar la salud de las personas y la biodiversidad, poniendo un freno a la ganadería industrial en el estado de Jalisco. Proteger la salud de las comunidades y el medio ambiente debe ser prioritario frente a salvaguardar las ganancias de particulares.

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