El grupo de Mountain View, California, fue acusado de gastar hasta 26 mil millones de dólares solo el año pasado para asegurarse de que su buscador fuera el utilizado por default en algunos teléfonos inteligentes y navegadores de internet. La mayor parte de esa suma tuvo como destino a Apple.
“Los acuerdos de distribución firmados por Google (…) impiden a sus rivales competir” contra la firma californiana, justificó el magistrado en su decisión.
Golpeada ya por la caída de los mercados financieros en todo el mundo este lunes, la cotización de Alphabet, matriz de Google, amplió sus pérdidas y terminó la jornada con un descenso de 4,61% al cierre de Wall Street, en 160,64 dólares.
En un comunicado, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, describió la decisión como “una victoria histórica para el pueblo estadounidense”.
“Ninguna empresa está por encima de la ley, y el Departamento de Justicia seguirá aplicando nuestras leyes contra las prácticas contrarias a la competencia”, agregó.
En una declaración de su presidente de Asuntos Globales, Kent Walker, Alphabet estimó que la decisión “reconoce que Google propone el mejor motor de búsqueda”. “Pero concluye que no deberíamos estar autorizados a hacerlo fácilmente disponible”, y “en estas condiciones vamos a apelar”, añadió.
Google es dominante en el mercado
El Departamento de Justicia considera que las prácticas de Google violan el derecho a la competencia y que los contratos son ilegales, ya que el buscador es dominante en el mercado.
Para las autoridades de la competencia, el mercado de referencia es el de las búsquedas generales en Internet. Google posee el 80 por ciento de este mercado en Estados Unidos.
Según la web Statcounter, a principios de julio el buscador de Google acaparaba más del 90 por ciento del mercado mundial, e incluso más del 95 por ciento de las búsquedas realizadas en teléfonos inteligentes.
El motor de búsqueda es una parte importante del modelo de negocios del grupo, ya que representaba más de 175 mil millones de dólares en ingresos publicitarios en 2023, de un total de ventas de 307 mil millones de dólares.
Pero también sirve de puerta de entrada a los servicios asociados de Google y destaca los videos de su plataforma YouTube, que suman otros 62 mil millones de dólares en ingresos publicitarios.
Es la primera vez que las autoridades estadounidenses de defensa de la competencia llevan a los tribunales a una gran empresa tecnológica desde que Microsoft fue objeto de un proceso hace más de veinte años.
Aquel caso contra Microsoft y el dominio del sistema operativo Windows ayudó a definir jurídicamente cómo una plataforma tecnológica abusa ilegalmente de su monopolio para castigar a sus rivales.