• Marcela Muñoz Martínez, titular de la SPSC, una de las que más se ha esmerado en sacar el mayor provecho de lo que estuvo a punto de convertirse en una desgracia.

 

Redacción/CAMBIO 22

San Francisco de Campeche, Campeche, 15 de octubre.-  Después de haber sobrevivido al hambre, la sed, la oscuridad y el miedo de perderse por días en el monte del municipio de Palizada, Campeche, Joel del Carmen Acosta Orama, de nueve años, ahora tiene que enfrentar y sobrevivir a la urgente necesidad de publicidad positiva de la administración de Layda Sansores San Román, que ha convertido a este humilde niño prácticamente en objeto utilitario.

Joel del Carmen, a quien se le conoce con el mote de “El Choco”, fue noticia nacional -e internacional- luego de que se perdiera el pasado 5 de octubre, en las inmediaciones del rancho San Antonio, perteneciente a Río Blanco II, para aparecer con vida, seis días después.

A partir de su localización, el pequeño ha sido objeto de una sobreexposición a los medios de comunicación, situación propiciada por funcionarios como la titular de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana de Campeche (SPSC), Marcela Muñoz Martínez y la propia Gobernadora Layda Sansores San Román.

De no haberse extraviado en el agreste territorio paliceño, Joel del Carmen, quien, como todo hijo de trabajador o jornalero del campo desde su nacimiento ha vivido en un ambiente de precariedad, posiblemente jamás hubiera obtenido la atención de las autoridades.

USO MEDIÁTICO DE UNA DESGRACIA, PARA LAVAR ROSTRO DE LA SPSC

El caso de “El Choco” le vino como anillo al dedo a la administración de Layda Sansores San Román, pero sobre todo a su secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana, Muñoz Martínez, quien aún no se recupera de los efectos negativos que generó a su gestión la rebelión policial.

Dadas las circunstancias, el caso del niño extraviado también ha servido como catalizador ante la andanada de sucesos, sobre todo de los asesinatos por pugnas territoriales entre células del crimen organizado, situación que propicia un clima de inseguridad entre la población.

Sabedores del valor mediático de la historia de Joel del Carmen, el Gobierno de Layda Sansores no dudó en separar al menor de sus padres para traerlo a la capital campechana, en donde fue ingresado al Hospital General de Especialidades Médicas “Dr. Javier Buenfil Osorio” y tras ser dado de alta se le alojó en el Centro Asistencial “María Palmira Lavalle”, en donde permanece desde el 11 de octubre.

Como expusimos líneas arriba, la administración laydista, pero sobre todo la secretaria de Seguridad, esta urgida de publicidad positiva para lavar o asear la deteriorada imagen de los mandos de la institución, por ello vemos ahora a una Marcela Muñoz altruista, generosa y amorosa,  esmerada en llevar regalitos y proveer de lo que sea necesario al niño Joel del Carmen.

La situación también la ha aprovechado el director del departamento de Vialidad de la SPSC, Rafael Miranda Ortiz, quien no se ha despegado del menor desde que fue encontrado en lamentables condiciones.

Digno de destacar es el hecho de que Miranda Ortiz y Muñoz Martínez prácticamente se adjudican todo el mérito de haber ubicado y rescatado al infante, al grado de afirmar que se sienten muy “satisfechos por su rescate”.

Sin embargo, si se acude a la auténtica narrativa se puede comprobar que, quienes tienen el mayor mérito son los pobladores de Palizada y del ejido de “El Zapote”, municipio de Candelaria, pues fueron los primeros en tener contacto con él.

En este momento Joel del Carmen es prácticamente propiedad de la administración laydista, misma que lo usará y le sacará el mayor provecho mediático, usándolo como si fuera un trofeo, lo cual no deja de ser un acto inmoral y denigrante.

Al iniciar la semana, uno de las primeras actividades que realizó la guanajuatense Muñoz Martínez fue visitar a “El Choco”, quien por al menos algunas semanas gozará del privilegio de comer tres veces al día.

Tras su última visita al albergue Muñoz Martínez publicó en su perfil de Facebook lo siguiente:

“¡Regresamos a visitar al pequeño Choco! Un valiente niño que pasó seis días solito… `mirando las estrellas`, acompañado de sus fieles perritos pero que ahora está recibiendo atención y cuidados en el Centro Asistencial `María Palmira Lavalle`”, señaló en una publicación Muñoz Martínez.

“Le llevamos unos regalitos, continúo la publicación, … pero la alegría de Joel al recibir sus juguetes no se compara en nada a la felicidad que sentimos todos al saber que Choco estaba a salvo gracias al compromiso de pobladores y de los tres compañeros policías que durante seis días no cesaron en su búsqueda”.

Este martes, quien requirió del menor fue la propia Gobernadora Sansores San Román.

“Esta tarde acompañamos a la gobernadora Layda Sansores San Román y a la presidenta del Patronato del DIF Estatal, Laura Sansores, a visitar a Choco”.

“Rafael Miranda y una servidora, seguiremos pendientes del pequeño Joel, quien está muy feliz por todo el cariño y amor que está recibiendo “, refirió una sensible Marcela Muñoz, que pasará a la historia por la indiferencia con que abordó el caso de las integrantes del grupo policial Mujer Valiente, que acusaron haber sido violentadas y abusadas por personas privadas de su libertad, durante el fallido operativo de extracción de reos que tuvo lugar el 15 de marzo, en el Centro Penitenciario de San Francisco Kobén, mismo que culminó en violento motín.

El caso del pequeño Joel del Carmen ha cumplido satisfactoriamente su propósito como distractor y está dando la oportunidad a los desacreditados funcionarios, de presentarse a la sociedad como servidores públicos responsables, benévolos y humanos.

Sin embargo, es imposible tapar el sol con un dedo, pues la percepción de la sociedad campechana es que en este momento tenemos uno de los gobiernos más nefastos e ineptos de la historia.

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

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