Fuertes Enfrentamientos entre Sicarios del CDS y el CJNG, Convierten a Chiapas en un Territorio sin Ley

Redacción/CAMBIO 22

TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis.- La disputa entre grupos del crimen organizado vinculados al Cártel de Sinaloa y al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que ha derivado en muertes y desplazamiento de comunidades indígena vivió la madrugada de este lunes un nuevo episodio de violencia dejando un saldo de dos persona muertas después de un enfrentamiento en el llamado “cruce de la muerte” de la carretera Ocozocoautla-Tuxtla Gutiérrez.

Los reportes indican que civiles armados se enfrentaron en dicho tramo carretero donde quedó el cuerpo sin vida de un hombre, alrededor de las 4:00 horas de este día y durante el enfrentamiento que se prolongó por una hora, varios trailers y pick ups, fueron atravesados en el punto para evitar el paso en la carretera Ocozocoautla-Tuxtla Gutiérrez; cuatro vehículos quedaron calcinados tras la balacera y media docena con daños producto del enfrentamiento.

Numerosas unidades de transporte público y vehículos particulares se vieron afectados por la violencia desatada, reportando impactos de arma de fuego en varios de ellos. En medio de la tragedia, una ambulancia de emergencia logró llegar al sitio, donde un civil armado fue herido por múltiples disparos a lo largo de la carretera.

Elementos de la Guardia Nacional, la SEDENA y de la policía de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, montaron un operativo para restablecer el orden y garantizar la seguridad de los ciudadanos en la zona afectada.

Como medida preventiva, se ha restringido la salida poniente de Tuxtla Gutiérrez, conocida como “La Pochota”, limitando el acceso únicamente a vehículos oficiales y de emergencia que requieran asistencia inmediata. Esta acción busca evitar la exposición de los ciudadanos a la zona de riesgo y mantener la calma en medio de la crisis.

En el escenario del enfrentamiento, se hallaron múltiples casquillos de arma de alto calibre, evidenciando la gravedad y la intensidad del conflicto armado que ha dejado varados a varios automovilistas y transportistas, así como el cierre parcial de la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, sumiendo a la región en un estado de incertidumbre y tensión.

Hasta el momento, las autoridades chiapanecas no han dado un saldo oficial de personas muertas o detenidas por la balacera; en los últimos años, Chiapas, por años un estado con bajos índices de violencia, está inmersa en una disputa entre grupos del crimen organizado vinculados al Cártel de Sinaloa y el CJNG, que ha derivado en muertes y desplazamiento de comunidades indígenas.

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