Federico Ibarra Groth Presenta su Visión de la Conquista de México
8 Abr. 2024Redacción/CAMBIO22
Ciudad de México. Un episodio poco difundido de la historia de México, la fatídica expedición que en 1524 encabezó el conquistador español Hernán Cortés a Las Hibueras, en la selva del actual Honduras, es el tema de El vencedor vencido, la más reciente ópera de Federico Ibarra Groth, cuyo estreno mundial será el 18 abril, a las 20 horas, en el Palacio de Bellas Artes, a cargo de la Compañía Nacional de Ópera.
Es el noveno título operístico escrito por el insigne compositor mexicano, uno de los más prolíficos dentro de este apasionante género.
La Conquista de México es un tema que rondaba en su cabeza desde 1992, cuando se conmemoraron 500 años del llamado Encuentro de Dos Mundos. La demora para concretar el proyecto se debió a que no encontraba al libretista apropiado, hasta que conoció al escritor Enrique Serna, quien se entusiasmó de inmediato con la idea.
No sé con cuántos dramaturgos me entrevisté. Todos decían que era muy interesante, pero parece que el tema les causaba escozor y me daban largas. Hablé con Serna y por fin se dio, y así comencé a trabajar. ¡Me entregó el libreto en tres meses! Eso fue hace más o menos tres años. A finales de 2023 terminé la obra y a ver qué ocurre ahora con ella, señala Federico Ibarra (Ciudad de México, 1946).
En entrevista , el también pianista y profesor emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México refiere que optó por ese pasaje poco conocido de la historia nacional porque existen otros títulos que tratan, con poca o mala fortuna
, la parte más difundida de la Conquista de México, realizados sobre todo por músicos europeos.
Aclara que la suya dista de ser una ópera épica o romántica, y no cabe la redención para nadie, ya que los personajes terminan trágicamente, todos son vencidos
, señala en referencia a los tres protagonistas de la trama: Hernán Cortés; Cuauhtémoc, el último emperador mexica, y La Malinche, la intérprete y pareja del conquistador español.
En la obra, conformada por tres actos y una duración de poco más de dos horas, el autor aborda con una visión muy humana los hechos históricos sucedidos tras la caída de la gran Tenochtitlan, a partir de la sique, los procesos humanos y los dramas que atraviesan aquella tríada de personajes históricos.
Es una ópera que mueve a la reflexión, tanto de los personajes como de las situaciones en las que se encontraban; incluso, es un poco intimista y más abocada a ver a cada uno de los personajes que las situaciones o describir otro tipo de aspectos, apunta.
Las situaciones son más bien el pretexto para adentrarse en el drama interno de los personajes. Cortés sufrió una derrota terrible tanto por la naturaleza como dentro de su persona. Por otro lado, aunque no es un personaje como tal, en la ópera hay una presencia permanente: el hambre. Cortés quiso creer que en su periplo encontraría poblados para conseguir alimentos, pero lo que halló fue un páramo.Para Federico Ibarra resulta inexplicable por qué el conquistador emprendió ese periplo a la selva hondureña.
Cortés se enteró de que un militar español se sublevó en Honduras a dos años de la caída de Tenochtitlan, y empieza una aventura muy extraña al irse con un ejército de 5 mil personas, de las cuales 90 por ciento eran naturales de estas tierras, y después de dos años regresa con ese ejército diezmado, con sólo 300 elementos.
El vencedor vencido está planteada en términos musicales como una obra contemporánea que aborda hechos históricos
. Es para orquesta completa, si bien pequeña, con añadidos de tres instrumentos: guitarra, viola y el antecesor del oboe, con los cuales el autor hace referencia en ciertas escenas a la música que sonaba en la época de la conquista.
Una de sus principales características es que no emplea las tesituras convencionales de la ópera para los protagonistas, al ser dos tenores y una soprano, con el propósito, precisa el autor, de que no haya héroes ni villanos.
–¿Toma alguna postura o emite un juicio de ese pasaje histórico a lo largo de la obra?
–Sí, se tiene que tomar una postura a través del libreto de determinados hechos. Lo primero que llamó mi atención es por qué Cortés se llevó a Cuauhtémoc a esa expedición, qué lo impulsó a hacerlo. Tal vez porque Cuauhtémoc pudo organizar una revuelta en la capital, aunque Cortés dejó resguardada la Ciudad de México.
Probablemente se lo llevó para evitar cualquier desaguisado, pero no hay una explicación de por qué lo mandó a matar estando fuera de México en esta campaña. ¿Qué fue lo que lo motivó? Ahí sí no encuentro respuesta. Fue un asesinato brutal e injustificado, si bien en el libreto se expone una teoría que no sabemos si sea cierta.
–Ha dicho que el arte de la ópera es para usted una forma de expurgar sus demonios, ¿cuáles son los que expulsa ahora con El vencedor vencido?
–Híjole, creo que los de todos nosotros. Es decir, nuestro origen y comportamiento, nuestra manera de ser y todo lo que nos dejaron en la sangre los ancestros. En ese sentido, es una búsqueda de nuestro origen.
En la dirección escénica, el montaje está a cargo de Hernán del Riego y, en la concertadora, de Iván López Reynoso, con la participación del Coro y Orquesta del Teatro de Bellas Artes. Además de la función de estreno, habrá una segunda el domingo 21 de abril a las 17 horas.
Fuente: La Jornada
redaccionqroo@diariocambio22.mx
MER