• En Acámbaro, la familia Mejía encuentra en el garbanzo una alternativa económica ante los efectos del frío en la pesca, abasteciendo a la comunidad local

 

Redacción / CAMBIO 22

Acámbaro, Guanajuato.- Eusebio Mejía Torres, junto con su familia, se dedica a la pesca, actividad que, debido a las bajas temperaturas, tiene una producción muy limitada en la Presa Solís. Por ello, en octubre siembran garbanzo para obtener un ingreso extra. Originario de la localidad de Santa Inés, Eusebio, junto con su yerno, sembró este año una hectárea y media de garbanzo, un producto que no requiere inversión en químicos ni fertilizantes, lo que hace que su producción sea más económica que la de otros granos.

El garbanzo que siembran es adquirido por la gente de la localidad, quienes lo utilizan para hacer gorditas que consumen en familia. Algunos también lo usan como alimento para el ganado. Al ser un grano que no requiere químicos ni fertilizantes, el garbanzo tampoco necesita grandes cantidades de agua para comenzar a crecer. “Es más económico apostar por la producción de garbanzo debido a que no se invierte tanto dinero en químicos como en el maíz u otros granos”, afirma Eusebio.

Ante falta de pesca por frío, familia Mejía siembra garbanzo en Acámbaro |  Periódico Correo

 

 

 

Fuente: Periódico Correo

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