La localidad de 42.000 habitantes se encuentra situada en la provincia de Hatay, una de las más afectadas por los sismos.

Redacción/CAMBIO 22

La ciudad de Erzin, situada en el epicentro de los demoledores terremotos que sacudieron Turquía el pasado lunes, no ha tenido que lamentar víctimas mortales, ya que su alcalde, Okkes Elmasoglu, había prohibido la construcción ilegal, informa el canal de televisión turco TV5.

Con una población 42.000 habitantes, la localidad se encuentra situada en la provincia de Hatay, una de las más afectadas por los sismos.

“No tenemos derrumbes. No hay víctimas ni muertos como consecuencia del terremoto”, reveló la semana pasada el alcalde en una entrevista con el canal que fue difundida rápidamente por la mayoría de los medios de comunicación turcos.

Elmasoglu atribuyó la falta de víctimas de los sismos a la prohibición de toda infracción de las normas de construcción y a las estrictas inspecciones.

“No hice ninguna concesión en este asunto”, recalcó el alcalde, afirmando que mucha gente estaba descontenta por ello, aunque —asegura— lo más importante es que su conciencia seguía tranquila.

“Tenemos algunos edificios muy dañados. Pero estos son ciertos resultados naturales de dos fuertes terremotos como el de 7,7”, dijo Elmasoglu.

También señaló que en Erzin los edificios más altos tienen 6 plantas, pero agregó que ni siquiera eso importa si se establecen controles urbanísticos adecuados.

“Intentamos, en la medida de lo posible, intervenir y no dejar pasar las inspecciones de edificios”, aseguró, citado por CNN Turk.

Además, dijo que la población debe cambiar radicalmente de actitud y ser consciente de que sus edificios serán demolidos si es necesario, sin tratar de impedirlo.

Turquía necesita un cambio total de mentalidad“, concluyó, al tiempo que argumentó que los ciudadanos ya no deben esperar ninguna indulgencia del Estado por la construcción ilegal.

 

 

Fuente RT

redaccionqroo@diariocambio22.mx

IAA

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