El Significado de la Visita de Un Colibrí a Tu Hogar

Redacción/CAMBIO 22

El colibrí, también llamado picaflor, es un ave pequeña y colorida que tiene varios significados en diversas culturas alrededor del mundo. Según los antiguos Mayas, la visita de este pájaro tiene un significado espiritual profundo.

La naturaleza juguetona y la forma enérgica del colibrí se asocian con la alegría y la felicidad. Por eso, su presencia se considera un recordatorio de disfrutar de la belleza de la vida y su significado es el encontrar placer en pequeñas cosas.

Sin embargo, para algunas tradiciones indígenas de América, como los Mayas, el colibrí tiene otro significado simbólico. A continuación te contamos las creencias de esta cultura con respecto a este ave.

Qué significa que se te acerque un colibrí, según los Mayas

Para los antiguos Mayas, el colibrí es considerado un mensajero divino. Su capacidad para moverse entre diferentes flores se interpreta como la conexión con el mundo espiritual, obteniendo así un significado de índole espiritual y de conexión con las deidades de la naturaleza.

La presencia de un colibrí se considera un augurio de buena suerte, debido a que se cree que traen consigo energías positivas y bendiciones.

Por otra parte, en la civilización Inca no solo era considerado como un mensajero de los dioses, sino también como un portador de buenos deseos y pensamientos entre los hombres. Transmitía los anhelos positivos de una persona a otra, siendo un símbolo de conexión y lealtad.

Para los aztecas, el colibrí era más que un simple animal; representaba valentía y energía en la guerra. Se asociaba con Huitzilopochtli, el dios de la guerra y patrón de los mexicas. Su imagen simboliza fuerza y coraje, y se usaba como amuleto para los guerreros.

Según la mitología maya, los colibríes desempeñaban un papel crucial como mensajeros tanto de los hombres como de los dioses de un lugar a otro. La leyenda cuenta que, después de que los dioses crearon todo en la Tierra, se dieron cuenta de que olvidaron asignarle a algún ser la tarea de llevar sus deseos y pensamientos.

Para solucionar esto, tallaron un pedazo de jade en forma de pequeña flecha y, al soplar sobre ella, la convirtieron en un colibrí. Esta criatura se convirtió en un mensajero respetado por los mayas.

Fuente: UNO

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