• Una especie que se creía extinta por más de 100 años ha sido encontrada, generando asombro entre los expertos y renovando el interés por proteger los ecosistemas donde habita

 

Redacción / CAMBIO 22

Las cámaras del Instituto Estatal de Medio Ambiente (INEA) de Río de Janeiro han registrado un hallazgo sorprendente: la reaparición del tapir sudamericano (Tapirus terrestris), el mamífero terrestre más grande de Sudamérica, en la región de la Costa Verde. Este acontecimiento, considerado histórico, marca el regreso de la especie tras más de un siglo sin registros en la zona.

Un total de 108 imágenes y vídeos captados en el Parque Estatal Cunhambebe (PEC) muestran tres ejemplares, incluida una hembra con su cría, deambulando por los densos bosques de la Mata Atlántica. Este parque, con una extensión de 38.000 hectáreas, fue establecido en 2008 y abarca áreas de Angra dos Reis, Rio Claro, Itaguaí y Mangaratiba, convirtiéndose en un refugio crucial para especies en peligro.

 

Más de 100 años de ausencia

El último registro de tapires en estado salvaje en la región data de 1914, cuando fueron observados en el Parque Nacional Serra dos Órgãos. Desde entonces, la urbanización y la caza intensiva provocaron su desaparición local, clasificándolos como una especie en peligro de extinción en esta área. Este reciente avistamiento marca un renacimiento inesperado y crucial para la biodiversidad.

Tapir

 

Una señal de esperanza para los ecosistemas

El tapir sudamericano cumple un papel esencial como «jardinero del bosque», dispersando semillas y contribuyendo al equilibrio del ecosistema. Su regreso a la Mata Atlántica, uno de los biomas más ricos en biodiversidad pero también más amenazados del mundo, es un símbolo de resiliencia y de la importancia de las áreas protegidas para la conservación.

El INEA, en colaboración con la empresa Vale, que instaló las cámaras de monitoreo, celebra este momento como un logro significativo en los esfuerzos por preservar la fauna de la región. Según un portavoz del instituto, «este hallazgo refuerza la relevancia de las áreas protegidas en la recuperación de especies emblemáticas».

Tapir

 

El Parque Estatal Cunhambebe: un santuario natural

El PEC, además de ser un refugio para los tapires, también alberga diversas especies en peligro, manteniendo interacciones ecológicas fundamentales como la dispersión de semillas y el flujo genético. En su cuenta oficial de Instagram, el parque destacó: «El PEC es un santuario que permite la supervivencia de especies clave para la biodiversidad, asegurando la salud de los ecosistemas locales».

La reaparición del tapir sudamericano en la Costa Verde es un recordatorio del impacto positivo que las iniciativas de conservación pueden tener. Este hallazgo inspira nuevas esperanzas para la preservación de la Mata Atlántica y sus valiosos habitantes.

Zonas protegidas, territorios en olvido

 

 

 

Fuente: Gizmodo

redaccion@diariocambio22.mx

GAVC / MER

WhatsApp Telegram
Telegram