El Papa León XIV, en Contra de la Política Migratoria de Trump
8 May. 2025
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León XIV será el 267 pontífice de la historia, sucediendo a Francisco, quien falleció el pasado 21 de abril con 88 años de edad
Redacción / CAMBIO 22
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró este jueves un “gran honor” para el país que León XIV sea el primer papa estadounidense y dijo estar deseando reunirse con él. No obstante, Robert Prevost ha dejado clara su postura en contra de la política migratoria promovida por el republicano y su vicepresidente JD Vance.
“Enhorabuena al cardenal Robert Francis Prevost, que acaba de ser nombrado papa. Es un gran honor saber que es el primer papa estadounidense. Qué emoción y qué gran honor para nuestro país. Estoy deseando reunirme con el papa León XIV. ¡Será un momento muy significativo!”, indicó el mandatario en su red social, Truth Social, tras el anuncio de la elección.

León XIV será el 267 pontífice de la historia, sucediendo a Francisco (2013-2025), quien falleció el pasado 21 de abril con 88 años de edad.
El nuevo papa nació en Chicago hace 69 años, aunque obtuvo también la nacionalidad peruana en 2015 tras pasar gran parte de su vida religiosa en el país andino, y su elección se produce en pleno Jubileo o Año Santo convocado por Francisco y que deberá clausurar el 6 de enero de 2026.
León y su contraste a la política migratoria de EU
A inicios del mes de febrero de este año, el entonces obispo Robert Prevost compartió una columna de opinión del diario National Catholic titulada “JD Vance está equivocado: Jesús no nos pide que clasifiquemos nuestro amor por los demás”, además de que el día 10 de ese mes compartió una carta del papa Francisco dirigida al episcopado de Estados Unidos.
En la misiva, el papa Francisco expresó su profunda preocupación por el inicio de un programa de deportaciones masivas en ese país y recordó que la dignidad humana debe estar por encima de cualquier política migratoria.

En el mensaje, el Pontífice vinculó el drama actual de la migración con el éxodo bíblico y con la experiencia misma de Jesucristo como migrante y refugiado. “El Hijo de Dios eligió vivir el drama de la inmigración”, escribió, destacando que ningún ser humano puede ser considerado ilegal en su dignidad.
Francisco criticó las narrativas que equiparan la condición migratoria irregular con la criminalidad, aunque reconoció el derecho de los países a proteger a sus ciudadanos. No obstante, advirtió que deportar a personas que huyen de la pobreza, la violencia o la degradación ambiental es una acción que “lastima la dignidad” de los afectados y los deja en un estado de vulnerabilidad e indefensión.
Francisco elogió la labor de los obispos estadounidenses en la defensa de los migrantes y exhortó a toda la Iglesia y a la sociedad a rechazar la discriminación, promover la fraternidad y construir puentes, no muros. Concluyó su carta pidiendo la protección de la Virgen de Guadalupe para todas las personas migrantes y deportadas.
Fuente: La Silla Rota
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