El Menchito: El Ascenso del Hijo del Narco que se Convirtió en el Número Dos del CJNG y que Entrenaba con Sicarios

• Con una habilidad letal y una obsesión por las armas, ‘El Menchito’ logró convertirse en el segundo al mando del Cártel Jalisco Nueva Generación, liderando operaciones que estremecieron a Jalisco antes de su captura en 2015.

Redacción/ CAMBIO22

Luego de un juicio en la Corte de Distrito de Washington, D.C., Rubén Oseguera González, alias “El Menchito”, fue declarado culpable de dos cargos de narcotráfico y manejo de armas de alto calibre.

Mientras se está a la espera de que se le dicte sentencia, se siguen conociendo detalles de su vida criminal, los cuales fueron revelados por los testigos que subieron al estrado.

Uno de estos detalles es su afición a las armas de fuego y su habilidad con estas, pues incluso practicaba junto con miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Así lo reveló durante el juicio Herminio Gómez Ancira, exdirector de la policía del municipio Villa Purificación, Jalisco, y quien también se desempeñó como jefe de seguridad para “El Mencho” y su hijo.

Durante su testimonio, aseguró que pudo observar la habilidad de Oseguera González con su rifle de asalto, cuando practicaba en un terreno de su propiedad, según informó el diario Milenio.

“Menchito era el único que le pegaba, estaba como a 500 metros”, recordó Gómez Ancira, quien además detalló cómo eran los entrenamientos cuando se utilizaban los lanzagranadas. “Le disparó a un carro viejo, como a 50 metros. Nada más se veía una gran explosión y quedaba un cochinero”.

Otros testimonios revelaron que el joven criminal tenía dos armas preferidas con las que iba a todos lados: una pistola de mano calibre .38 súper, y un rifle M16 camuflado con un lanzagranadas integrado. Ambas armas lo acompañaron incluso hasta el día de su detención, ocurrida en junio de 2015.

Su afición a las armas fue clave para la fiscalía estadounidense, la cual explotó esta situación para demostrar que “El Menchito” utilizó arsenal como parte de su negocio de tráfico de drogas.

El M16 con tres de sus apodos grabados y las temibles siglas del CJNG, fue parte de la evidencia recurrente que se utilizó para que fuera encontrado culpable por un jurado en Washington a finales de septiembre.

Fuente: La Opinión

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