Graciela Machuca Martínez

Mientras la familia de Aitana Betzabé Domínguez, de seis años de edad y originaria de Yucatán, realizan sus funerales, luego de perder la vida al quedar prensada en un elevador del Hospital General de Zona No. 18 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Playa del Carmen, Quintana Roo, el director General del organismo federal, Zoé Robledo Aburto, ya tiene preparadas sus maletas para dejar el cargo e irse a buscar la candidatura al gobierno del estado de Chiapas, como lo dio a conocer el pasado 14 de junio.

A él no le importan las decenas de recomendaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que ha acumulado el IMSS del primero de diciembre de 2018 a la fecha, porque su proyecto político es ser gobernador de Chiapas por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).

Lo único que ha podido decir hasta el momento, al igual que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, es que se investigará a fondo y que se sancionará a los responsables, como si entre sus facultades tuvieran las de Ministerio Público.

Como representantes del gobierno federal en este asunto, deben actuar con base en los principios de transparencia y rendición de cuentas, porque la muerte de esta niña, solo es una de los cientos de víctimas que ha dejado la institución por negligencia médica, así como por la falta de presupuesto para atender los requerimientos más urgentes como equipo, insumos, personal, así como instalaciones acordes a las necesidades de la población derechohabiente del IMSS.

La mayoría de los servidores públicos del gobierno federal que buscan la gubernatura por MORENA en Ciudad de México, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán, esperan que avance el proceso de selección de la persona candidata a la presidencia de la república para dejar votados los cargos e irse en busca de un nuevo presupuesto.

Cómo es el caso más reciente de Javier May, director General de FONATUR, quien el 11 de julio declaró que presentará su renuncia con fecha primero de septiembre para ir en busca de la candidatura de MORENA para el gobierno de Tabasco.

El presidente de la república les dijo a quienes quieran contender por alguna gubernatura u otro cargo de elección popular, que lo hagan público y por ello Zoé Robledo tuvo que declarar el 14 de junio, así casi un mes su decisión de dejar el IMSS, pero no ha hecho pública la fecha de su renuncia.

Pero desde que llegó a la dirección general de este organismo federal decidió incrementar su presencia en Chiapas, lo cual está documentado en sus múltiples viajes a esa entidad, con el argumento que se trataron de giras de trabajo.

La Revista Expansión al revisar las giras que ha realizado a lo largo de su administración, de los 154 viajes realizados, 40 han sido a Chiapas.

“Tan sólo en el primer semestre de 2023, Zoé Robledo tuvo 46 giras en 21 estados del país. De los 46 viajes, 12 los hizo a Chiapas, es decir, fue a este estado dos veces al mes en promedio, según los comunicados oficiales que difunde el IMSS”, de acuerdo a una publicación de Expansión del 10 de julio de 2023.

Los estados que más ha visitado este año después de Chiapas son Tamaulipas, a donde ha viajado cuatro veces; San Luís Potosí y Oaxaca, con tres ocasiones.

Si se toman en cuenta los informes de gastos, entre mayo de 2019 —cuando asumió la dirección del instituto— a diciembre de 2022, de los 108 viajes reportados, 28 fueron a Chiapas. Nuevamente, la entidad con más visitas. Después Sonora (10), Nuevo León (8), Oaxaca (7) y Jalisco (6).

Zoé y MORENA ya tienen todo arreglado en Chiapas para ganar la gubernatura el primero domingo de junio de 2024 y suceder a Rutilio Escandón Cárdenas, pues desde hace más de seis meses, según Data Encuestas, ha sido el candidato puntero desde hace seis meses. 

En contubernio con la presidencia de la república ha estado utilizando su cargo público para promoverse electoralmente, de allí lo poco o nada que le interese lo que pase o deje de pasar con la población derechohabiente del IMSS.

Otras encuestadoras como Massive Caller, RUBRUM e IQ Comunicación coinciden en que con una intención del voto del 48.6 por ciento, Morena es el partido en el que más confía el electorado chiapaneco.

A la clase política del país, sea del partido que sea, solo le importa la ciudadanía cuando es sinónimos de votos para alcanzar un nuevo cargo y poder disponer de los recursos del pueblo, por ello, las decisiones y omisiones de la 4T para que el INAI y los diferentes organismos de transparencia dejen de funcionar.

Cómo director general del IMSS, a Zoé Robledo le compete informar qué empresa tiene el contrato del mantenimiento de los elevadores en el IMSS, porque hay versiones encontradas de los mismos funcionarios de la institución.

El tema de los elevadores en el IMSS, en el ISSSTE y en los hospitales de la Secretaría de Salud, es que siempre están descompuestos, los camilleros tienen que trasladar a los enfermos en camillas por las escaleras, cuando los reparan, vuelven a fallar a las pocas semanas y días, porque no hay presupuesto para una reparación a fondo o sustitución total del equipo.

El gobierno del la 4T se comprometió que se terminaría con la intervención de la iniciativa privada en el sector público, pero en el Sector Salud se subrogan infinidad de servicios, hasta las radiografías de las piezas dentales, desde luego que eso no lo sabe el presidente de la república, porque no le interesa la calidad del servicio que se le presta a las personas usuarias.

Zoé Robledo, antes de renunciar para irse a hacer campaña por la gubernatura de Chiapas, debe rendir cuenta de lo que hizo y no hizo en el IMSS, la muerte de Aitana y muchas víctimas más no pueden quedar en la impunidad que solapa la clase política y gobernante.

 

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

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