Durante la Administración de Adán Augusto López en Tabasco, La Barredora Logró Penetrar en Campeche, Chiapas y Veracruz
20 Dic. 2025
Redacción / CAMBIO 22
Durante el gobierno de Adán Augusto López en Tabasco, el grupo criminal La Barredora se consolidó en ese estado y luego se expandió hacia entidades vecinas, de acuerdo con un análisis del investigador Víctor Sánchez Valdés, profesor de la Universidad Autónoma de Coahuila.
El especialista en seguridad pública dijo a La Silla Rota que la operación del grupo que encabezaba Hernán Bermúdez Requena, secretario de Seguridad Pública de Tabasco, se mantuvo durante el periodo de Carlos Manuel Merino Campos, sucesor interino de López.

En entrevista, el doctor Sánchez Valdés explicó que el punto de inflexión para la organización se dio una vez que logró consolidar su control en Tabasco, donde llegó a tener presencia en 14 de los 17 municipios del estado.
De acuerdo con el especialista, operó en municipios como Centla, Cárdenas, Huimanguillo, Comalcalco, Paraíso, Nacajuca, Jalpa de Méndez, Cunduacán, Centro, Jalapa, Teapa, Jonuta, Macuspana y Tacotalpa.
A partir de ese momento se inició un proceso de expansión hacia entidades vecinas, particularmente en zonas colindantes con Chiapas, Veracruz y Campeche.
La Barredora en terreno de familiares
En el caso de Chiapas, La Barredora se extendió principalmente hacia el norte del estado, en municipios colindantes con Tabasco, durante el periodo en que Rutilio Escandón, cuñado de Adán Augusto López, fungía como gobernador.
En Campeche, el grupo criminal logró presencia en Palizada y, de manera destacada, en Ciudad del Carmen, una zona estratégica por su relevancia en la industria petrolera.
En Veracruz, la expansión se dio en la región sur, particularmente en municipios cercanos a Tabasco y Chiapas, como Minatitlán, Coatzacoalcos, Moloacán, Acayucan y Las Choapas, explicó Sánchez Valdés.

De acuerdo con el investigador, este crecimiento territorial no fue espontáneo, sino que estuvo vinculado a las condiciones políticas y de seguridad en Tabasco durante los gobiernos de Adán Augusto López Hernández y Carlos Manuel Merino Campos. En ese contexto, Hernán Bermúdez Requena, entonces secretario de Seguridad Pública del estado, jugó un papel central.
Según Sánchez Valdés, Bermúdez Requena, hoy preso en el penal del Altiplano, acusado de asociación delictuosa, extorsión y secuestro exprés, estableció una alianza con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y utilizó a La Barredora como una organización local para operar actividades delictivas como el robo de combustible, la venta de drogas y la extorsión.
Esta relación permitió que La Barredora operara con altos niveles de impunidad en Tabasco, ya que, de acuerdo con el especialista, el aparato de seguridad estatal no actuaba en su contra y, en algunos casos, contribuyó a desplazar a organizaciones criminales rivales.
Como resultado, La Barredora amplió su capacidad operativa, incrementó sus ingresos y extendió su presencia territorial hasta alcanzar, en su momento de mayor expansión, 38 municipios en cuatro entidades federativas: Tabasco, Chiapas, Veracruz y Campeche, detalló el investigador.

El declive de la organización
El debilitamiento comenzó tras la detención de Hernán Bermúdez Requena y de otros mandos relevantes, así como por la presión mediática y pública sobre las autoridades estatales, particularmente en Tabasco y Chiapas. A ello se sumó la ruptura de la alianza con el CJNG, lo que derivó en disputas territoriales y episodios de violencia en la entidad tabasqueña.
“El abuelo” fue relegado en enero de 2024, luego de una oleada de crímenes que culminó con la quema de vehículos y tiendas de autoservicio en Villahermosa.
Sobre el futuro de La Barredora, Víctor Sánchez Valdés señaló que existen distintos escenarios posibles, entre ellos su desaparición en el mediano plazo, un desgaste prolongado sin crecimiento o su fragmentación en grupos más pequeños que podrían cambiar de nombre o buscar nuevas alianzas criminales.
Por ahora, explicó, será necesario observar la evolución del fenómeno criminal en las entidades donde La Barredora tuvo presencia para determinar cuál de estos escenarios termina por materializarse.

De acuerdo con el Centro de Fusión de Inteligencia de la Secretaría de la Defensa (Sedena), Hernán Bermúdez no combatió al crimen, como era su obligación, sino que se convirtió en cabeza de una célula del CJNG en Tabasco y se encargó de atacar a otros grupos que rivalizaban con esa organización.
Desde el año 2021, ese grupo de inteligencia advirtió a los mandos del ejército que “El abuelo” colocó en mandos de la Secretaría de Seguridad a otros integrantes del CJNG y que estos ordenaban la eliminación de sus rivales y ordenaban que los cuerpos se dejaran en Chiapas para que no quedara la percepción de violencia en su estado.
Bermúdez fue designado secretario de Seguridad por López Hernández, hoy coordinador de Morena en el Senado, y se mantuvo en el cargo cuando este dejó la gubernatura para asumir la Secretaría de Gobernación en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Fuente: La Silla Rota
KXL/RCM




















