Renán Castro Madera/CAMBIO 22

La disputa de carteles de la droga por el control de la codiciada Plaza de Quintana Roo, se acrecenta a diario y amenaza con aumentar los crímenes de alto impacto al confirmarse el ingreso del cártel del Pacífico a ciudades de la entidad.

Este reacomodo que enfrenta el submundo del crimen organizado en Quintana Roo, ha provocado la desaparición de personas en la zona Norte, Centro y Sur de la entidad y producto de la disputa del cártel del Pacífico (Los Chapitos) al cártel de Caborca, que dirige la familia Caro Quintero.

Si bien, el predominio de los Caro Quintero se impone en ciudades y poblaciones de la zona centro y Sur de la entidad, las alianzas contraídas con grupos asentados en municipios del Norte provocan el incremento de la violencia principalmente en el ambicionado corredor que conforman los destinos vacacionales asentados en la Riviera Maya quintanarroense.

Y es que las desapariciones forzadas ocurridas en los últimos días en el estado, acrecentan el número de desaparecidos que según cifras oficiales redundan en más de 2 mil 500 personas, reflejan está disputa que elevará el nivel de violencia en las siguientes semanas según vaticinan especialistas en la materia.
Y en esta sangrienta disputa la desaparición de personas inocentes causa dolor e impotencia en familias que ven este fenómeno sin que las autoridades competentes puedan resolverlo, por la penetración de estás organizaciones criminales en los cuerpos de seguridad asentados en la zona.

Y ejemplo contundente de este fenómeno es el caso del trabajador hotelero Daniel Agustín Tirado Vera, quien arribó al municipio de Othón P. Blanco, al poblado de Xul-Ha, en dónde fue contratado para administrar unas cabañas ecológicas.

Sin embargo, su origen sinaloense provocó que fuera confundido por un integrante del cártel del Pacífico y fuera víctima de una desaparición forzada; hasta la fecha se desconoce su paradero.

Versiones extraoficiales atribuyen la autoría de su desaparición al cártel de Caborca, quien lo había confundido como integrante del cartel del Pacífico fracción Los Chapitos, quienes mantienen una disputa con los Caro Quintero, por el control de las rutas aéreas establecidas en la entidad.

Daniel Augusto Tirado Vega, es un hombre originario de Culiacán Sinaloa y fue “levantado” en Xul-Ha, desde noviembre del año pasado, continua sin ser hallado a pesar de que su familia inició una campaña a nivel nacional con la etiqueta #DondeEstaDanielTirado.

A 107 días de su desaparición la fiscalía general del Estado no ha dado resultados a los desesperados clamores de ayuda de sus familiares de Daniel Agustín Tirado Vega de 38 años, quien fue “levantado” en XulHa el pasado 26 de noviembre del 2022, cuando se encontraba trabajando en la administración de una palapas.
Durante la ilegal privación de su libertad, otra persona también fue secuestrada, pero posteriormente fue liberado.

Ante la falta de resultados de la FGE, la familia inició una campaña a través de las redes sociales con el hashtag #DondeEstaDanielTirado, en el que varias voces de familiares y amigos preguntan por su paradero.

Incluso una cadena de televisión nacional ha intervenido y en una entrevista el fiscal general del estado aseguraba estar cerca de dar con el paradero, además, expuso que podría estar relacionado con otros hechos similares ocurridos al sur del estado.

Sin embargo, esta es una muestra de las confrontaciones de las organizaciones criminales que disputan el territorio y que anteriormente se había manifestado con el levantón y ejecución de ocho personas el pasado 20 de junio del 2022, que habitaban en el poblado de Xcalak en el sur de Quintana Roo, a quienes según informes extraoficiales fueron secuestrados por un comando armado del cártel del Pacífico.

Seis días después las ocho personas aparecieron ejecutadas y embolsadas en el municipio de Chikindzonot Yucatan, colindante con el municipio quintanarroense de José María Morelos Quintana Roo.

Estimaciones de expertos en la materia presumen que esta confrontación se Incrementará en las siguientes semanas por el valor que ha adquirido, tanto por las pistas clandestinas que operan aquí como el millonario corredor de la droga que opera desde Cancún hasta Tulum.

En tanto familias inocentes lloran y seguirán llorando a sus muertos, víctimas por igual de las ambiciones de políticos y políticas que se suman a lon intereses de grupos criminales que un día sí y otro también hunden en el descrédito a Quintana Roo.

 

 

 

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