Sin embargo, pese a contar con varias mujeres y hombres ilustres, una de las características en la generación de muralistas mexicanos fue el machismo. Graciela Amador Sandoval, esposa de Siqueiros incluso relató en una serie de memorias cómo fue invisibilizada por el muralista.
El muralismo mexicano es una de las etapas más importantes del arte en el país, aunque fue dominado principalmente por hombres. Entre las pocas mujeres que participaron se encuentra María Izquierdo, a quien Diego Rivera y Siqueiros le habrían quitado la oportunidad de tener mayor proyección para dar a conocer su trabajo.
Durante la Revolución Mexicana nace el muralismo en paralelo al movimiento de transformación, pero adquiere fuerza en 1921 cuando José Vasconcelos, Secretario de Educación Pública bajo el Gobierno del Presidente Álvaro Obregón, invita a varios artistas a pintar murales en la Secretaría Nacional y la Escuela Nacional Preparatoria, de acuerdo con la SRE.
























